Desde la Sección Sindical de CNT en La Veloz nos vemos obligados a emitir este comunicado muy a nuestro pesar, tras comprobar lo que dura la palabra de quien dice representarnos.
Aunque nos estábamos imaginando que iba a pasar algo así no deja de molestarnos acabar teniendo razón, quizá porque entendemos que la palabra es lo único que tenemos y que traicionarla nos coloca en una posición de desconfianza que no deberíamos tener entre compañeros. Lamentablemente hay algunos que se esfuerzan en demostrar que ni lo son ni quieren serlo, y pisotean su credibilidad en cuanto se ven en la tesitura de responder a lo que las asambleas dictan o agachar la cabeza ante sus dirigentes y la empresa traicionando a sus compañeros.
Esto exactamente es lo que ha ocurrido justo después de que la última asamblea rechazara la propuesta de turnos elaborada por la empresa donde volvían a figurar jornadas de más de 10 horas. Nuestros “queridos representantes” han hecho oídos sordos y vulnerando las razones esgrimidas por los trabajadores para rechazar esos turnos, en representación directa a través de la asamblea, los han vuelto a colocar en silencio, por la puerta de atrás y sin consultar a nadie.
Es más, cuando hemos acudido a pedir explicaciones al Departamento de Tráfico nos dicen que no saben nada de lo acordado en las asambleas y que se han limitado a pasar unos turnos y que al Comité le ha parecido bien.
Mientras han venido a las reuniones a hacer un papel digno de un Goya o un Oscar incluso (“lo suyo es puro teatro” que decía La Lupe) por detrás han actuado como si nada hubiese sucedido, como si los trabajadores no tuviésemos nada que decir, como si no fuésemos más que una rueda o una tuerca de los vehículos que movemos y a las que nadie en su sano juicio escucharía.
Las asambleas no son más que un teatro para ellos, pero para nosotros juegan un papel fundamental. Es la única forma de escuchar realmente la voz de los trabajadores y atender a sus necesidades por encima de interpretaciones. Echar una papeleta cada cuatro años y que sigamos con el pico cerrado el resto del tiempo es el sueño hecho realidad de todo empresario y sus esbirros, en tanto que dan carta blanca para mantener unas condiciones de trabajo insoportables e incluso endurecerlas.
El control de los delegados que nos representan es fundamental para evitar las traiciones que vemos constantemente en esta empresa y en la sociedad en general, y dicho control se impide de facto con el sistema de representación instituido. Por algo es aceptado de buena gana por la patronal.
Solo organizándonos de forma horizontal, no jerárquica, impulsando y dotando de contenido las asambleas y defendiendo los acuerdos adoptados en ellas lograremos recuperar la fuerza necesaria para defender nuestros derechos constantemente vulnerados con la permisividad de quienes dicen representarnos.
¡ROMPE CON QUIEN TE TRAICIONA!
¡ORGANÍZATE Y LUCHA!