Los trabajadores de Torneo Parque Control S.L., en villas turístico-residenciales Vista de Lobos en Playa Blanca, entendemos que la empresa continúa poniendo en riesgo nuestra salud ante el COVID19, ya que las condiciones en el centro de trabajo eran lamentables mucho antes de la pandemia, ya que ni siquiera tenemos agua para la higiene más básica, y lo siguen siendo a día de hoy.
Desde el inicio del Estado de Alarma solicitamos a la empresa una exahustiva evaluación de prevención de riesgos laborales, ya que entendíamos que nuestras vidas podían estar en riesgo ante la amenaza de pandemia de COVID19, a lo que la empresa contestó con una supuesta evaluación de riesgos que no corresponde con el centro de trabajo de Lanzarote, sino con las oficinas que tiene la empresa en Mairena del Aljarafe (Sevilla).
Para contrarrestar la falta de agua en el centro de trabajo la empresa puso a disposición una serie de garrafas vacías rellenadas sin quitarle tan siquiera la etiqueta de agua embotellada, lo cual además, no facilita su manejo ni cuentan con accionado de brazo-codo ni pie para tener las manos libres y poder llevar a cabo un correcto lavado de manos. Por otro lado, la falta de mascarillas es evidente en el centro de trabajo, cuya protección ha de ser como mínimo FFP2.
Nuestras pretensiones en base al Art. 21 de la ley de prevención de riesgos laborales en ningún momento ha sido atendida por parte de la empresa, por lo que hemos estado trabajando en condiciones muy complicadas, sin los epis necesarios, más que una caja de guantes, y sin agua corriente para la correcta higiene de manos, como así requieren los organismos de Sanidad, sin que los trabajadores hayan dejado de cumplir con sus obligaciones.
Ya en el mes de noviembre del año pasado denunciamos las lamentables condiciones de trabajo ante la Inspección, y que también realizamos jornadas maratonianas de 12 horas durante 6 días a la semana en estas condiciones. A día de hoy los trabajadores continuamos sin contestación por parte de Inspección de Trabajo, tanto sobre las medidas adoptadas en las denuncias de noviembre de 2019 como las nuevas denuncias durante el estado de alarma.
Lo más sangrante ha sido la desestimación de las Medidas Cautelares por parte de los Juzgados de lo Social en Lanzarote, quienes probablemente con esta medida han dejado desprotegidos a los trabajadores frente a la epidemia del COVID19, sobre todo viendo las condiciones a los que los expone la empresa, la cual además amenaza con tomar represalias por reclamar lo que es de justicia, es decir, que no se ponga en riesgo nuestra salud y no se especule ni mercantilice como una materia más del capitalismo.
