Kebab Pak Europa es una empresa que mantiene a sus empleados en condiciones lamentables, obligándoles a trabajar por cinco euros la hora. El tipo de contrato es temporal por un tiempo máximo de nueve meses que se van encadenando de forma indefinida, obligando a los trabajadores a firmar la liquidación sin recibir un céntimo ni disfrutar de sus vacaciones, cambiándoles de empresa en cada contrato para que no puedan mantener la antigüedad y estando dados de alta por diez horas semanales mientras trabajan catorce. Además de todo esto los empleados no reciben el total del dinero reflejado en la nómina lo que significa que, a parte de de robarle de su sueldo, las cuatro horas semanales de más que realizan son gratis para la empresa.
Y la cosa no acaba aquí, encima las condiciones de seguridad son prácticamente inexistentes: motos sin frenos, sin luces y con las ruedas gastadas, los repartidores no han recibido ropa de trabajo ni cascos de su talla ni en buen estado.
Dos empleados de esta empresa se acercaron a CNT hartos de aguantar esta situación durante tres años. Desde el Sindicato se les aconsejó que se negaran a firmar la nómina hasta que se la abonaran completamente y cambiaran sus condiciones de trabajo. Esto desencadena que la empresa les coaccione a que firmen la nómina con la amenaza de ser despedidos. Los dos compañeros se mantienen en su decisión y este Kebab los despide inmediatamente sin ningún remordimiento.
Después de varias reuniones entre la empresa y los trabajadores sin llegar a ningún acuerdo desde CNT decidimos actuar e intentar la readmisión de los dos compañeros con unas condiciones justas para los trabajadores. La empresa se mantiene reticente a volverlos a contratar para que no se revuelva el gallinero y ofrece a los empleados despedidos una indemnización mayor a la correspondiente para no tener que readmitirlos, a lo que ellos se niegan rotundamente. Después de varias reuniones presionando a la empresa este Sindicato ha conseguido la readmisión de los compañeros, con contrato indefinido, trabajando sólo las diez horas semanales y recibiendo la cantidad reflejada en la nómina.