CNT salió a la calle para denunciar la terrible situación que sufre la clase obrera, con un paro galopante y una nueva vuelta de tuerca en la precariedad
CNT salió a la calle en Tenerife para
reivindicar una fecha histórica que ha marcado el significado de la
lucha obrera por unos derechos, pagados en muchas ocasiones con sangre, y
que unos pocos que se autointitulan como «interlocutores sociales» se
permiten dilapidar reforma laboral tras reforma laboral. CCOO y UGT
están cumpliendo a la perfección su papel de desmovilizar a las clase
obrera de este país, gritando a los cuatro viento un supuesto «pacto
social» que no es otra cosa que, simple y llanamente, malvender nuestros
derechos para que estos «sindicalistas profesionales» continúen
manteniendo sus privilegios.
Claro ejemplo de la verdadera cara de este sindicalismo oficial,
ocultado tras la máscara de la demagogia de radicalismo, lo hallamos en
la situación en que UGT ha dejadoa cientos de trabajadores de FUNDESCAN,
fundación creada por este supuesto sindicato (que en la realidad es una
empresa) para gestionar los cursos de formación que, tras años de
oscuros negocios, ha tenido que cerrar por la «desaparición» de más de 8
millones de euros de subvenciones públicas. La consecuencia de este
negocio, como verdaderos empresarios que son, ha sido que sus
trabajadores no han cobrado sus salarios desde hace más de 5 meses y
tampoco han podido solicitar las ayudas por desempleo pues UGT se niega a
despedirlos, buscando que tiren la toalla y se vayan por decisión
propia. Nuestra total solidaridad con este colectivo de trabajadores y
trabajadoras que, a pesar de la presencia policial que los arrinconó e
impidió que expresaran libremente su denuncia, lograron hacer oír su voz
frente a los cabecillas de este robo.
Durante el recorrido de la manifestación, en verdadera «vía crisis» se
fue denunciando a la patronal, los sindicatos, los organismos públicos y
los partidos políticos, todos ellos fraguando la total
desregularización del mercado de trabajo en España como si más
precariedad fuera la solución para los desmanes de una economía basada
en la especulación y la explotación.
