80 ANIVERSARIO DEL PERIÓDICO CNT
Tras más de cien años de lucha, la CNT continúa su lucha sin
descanso por una sociedad libre e igualitaria.
I. Nistal | Periódico CNT
Ilustración: Carlos Azagra
A pesar de que aún queda un largo
camino por recorrer para que la CNT vuelva a ser un referente en la clase
trabajadora, lo cierto es que en los últimos años el sindicato está sentando
unas bases sólidas que invitan al optimismo en este sentido.
En ocasiones aparecen destellos que reflejan la
potencialidad que sigue habiendo en la central anarcosindicalista. Como
ejemplo tenemos la Huelga General que
protagonizó la CNT en la población sevillana de Lebrija en febrero de 2009, la
primera desde el comienzo de la crisis. Y si de crisis hablamos, no podemos
dejar de mencionar la avalancha de movilizaciones en las que han participado
los compañeros y compañeras cenetistas, desde las huelgas generales, a las
sectoriales y de empresa (Metro de Madrid, Iberia, ABB, Ludotecas…), todo ello
debidamente reseñado en su momento a través de las páginas del periódico. A su
vez el sindicato ha potenciado diferentes campañas en sintonía con las
diferentes problemáticas que se nos presentan como la realizada contra el Pacto
Social, las diferentes reformas laborales, contra el paro y por el reparto de
la riqueza, o la última por unas pensiones dignas.
A ello hay que sumar el aumento
de la afiliación, la constitución de sindicatos y núcleos confederales, la cada
vez mayor presencia en las empresas a través de las secciones sindicales, y lo
más importante: el alto porcentaje de victorias sindicales, fruto también de la
progresiva formación de la militancia. Todo ello quedó confirmado tras la
celebración del X Congreso celebrado en 2010 en Córdoba.
En el plano social el periódico
acogería con gran entusiasmo la irrupción del 15M en la sociedad española, sin
duda uno de los hechos más destacables de las últimas décadas y con unos
principios y criterios en buena parte parejos a los de la CNT. En este sentido
no es de extrañar la amplia participación de cenetistas en esta experiencia,
así como el acercamiento y la colaboración en diferentes localidades. El
llamado movimiento de los indignados no hizo sino que visibilizar la larga
lucha de los movimientos sociales en sus diferentes ámbitos: ecología, feminismo,
okupación, derechos de los inmigrantes, etc., áreas en los que los diferentes
sindicatos de la CNT también se ocupan en el día a día.
Mención especial merece la
celebración del CeNTenario con la proliferación de actos culturales
reivindicando el pasado, presente y futuro del ideario anarcosindicalista, tan
vigente hoy como su fundación en 1910. Sin duda para los militantes que hemos
podido conmemorar esta gran efeméride se trata de un recuerdo que ya
permanecerá imborrable en nuestra memoria. Y como la CNT ha sido una tarea
colectiva durante generaciones, el monolito levantado en Montjuic recuerda para
la inmortalidad a aquellos hombres y mujeres que codo con codo y desde las
entrañas del proletariado, sin líderes ni vanguardias, hicieron realidad ese mundo
nuevo que todos los anarquistas y anarcosindicalistas llevamos en nuestros
corazones.
