CNT A FONDO | TARRAGONA
Teresa Domingo, secretaria general del sindicato responde al cuestionario en el que analiza la rápida evolución experimentada en los últimos años, y la importancia de las secciones sindicales que tienen desplegadas en los diferentes sectores productivos de la ciudad.
Redacción | Periódico CNT
Pregunta.–
Haznos una introducción a la actual composición de clases en Tarragona
Respuesta.– Tarragona es una ciudad industrial pero en la provincia
hay una fuerte presencia agrícola (el Camp de Tarragona). Pero todos aquellos
trabajos relacionados con la burbuja inmobiliaria, que hicieron ganar tanto dinero
que los obreros y obreras creyeron pertenecer a la clase media, se han
minimizado o evaporado.
La gente que trabaja en la industria sigue ganando un
sueldo más o menos decente, pero el campo por ejemplo hace tiempo que se vio
afectado por la entrada en la Unión Europea.
P.– ¿Cuál es la composición política a
nivel oficial?
R.– Tarragona
es una ciudad que se fundó con una base muy fuerte de conventos y de presencia
militar. Eso hace que sea una ciudad de mentalidad fuertemente conservadora.
Actualmente el Ayuntamiento es del PSC. En realidad, el PSC
y CiU sacaron el mismo número de concejales, y Convergencia estuvo en tratos
con el PP para coger juntos la alcaldía pero no llegaron a ningún acuerdo
porque tanto la candidata de uno (CiU) como el candidato del otro (PP) querían
ser alcaldes. Además de estos tres partidos hay una concejala de IU/Verds, la
izquierda ecologista.
P.–
¿Cuál es el ambiente de conflictividad obrera en la localidad? ¿Y a nivel
social?
R.– La
mayoría de las personas que todavía conservan su puesto de trabajo tienen miedo
de perderlo. La gente está asustada y pienso que desconcertada por la grave
crisis que sufrimos, y piensa que es coyuntural, o sea, que es de un tiempo
limitado en el tiempo, y no se da cuenta que la precarización del trabajo será
estructural, que es a eso a dónde nos quieren llevar, que el llamado Estado del
Bienestar, después de cumplir con su objetivo de convertir a la gente en un
rebaño acomodado, ha perdido su razón de ser y desparecerá para volver a un
capitalismo sin cara amable, a una especie de nuevo siglo XIX con la diferencia
de que seguimos anclados en la recuperación de algo que pronto pasará a la
historia y sin que la gente se conciencie de que la única solución real es la
revolución.
A nivel social se producen manifestaciones y
concentraciones pero, excepto por la ola que provocó el llamado 15-M, la
participación se reduce a `los de siempre´. La gente está muy harta,
desencantada del sistema político, y pienso que este momento es el ideal para
promover las ideas anarquistas, pero a la mayoría se le ha imbuido la idea de
que la anarquía es caos y desorganización. No comprenden que la ausencia de
jerarquía no quiere decir desorden.
P.– El proceso soberanista en Cataluña,
¿influye de alguna forma a la hora de llevar a cabo la actividad sindical y
social anarcosindicalista?
R.– En Tarragona y en Catalunya en
general muchísima gente es independentista por la influencia mediática y el
lavado de cerebro de la televisión y de los mass media, que es como la tortura
china de la gota de agua. Creen que todo se solucionará con la independencia,
cosa que no resiste el menor análisis lógico y racional. No se dan cuenta de
que el problema es el Estado – sea español o catalán – y el capitalismo.
En
general, convivimos pacíficamente, por ahora, ellos con sus postulados y nosotros
con los nuestros. Decir también que no somos lo suficientemente fuertes como
para hacerles sombra, en la actualidad, y quizá por ese motivo no hay
conflictos dignos de destacar.
P.– ¿Cuál es la trayectoria reciente de
la CNT en Tarragona y su presencia en las empresas y sectores productivos?
R.– El
sindicato de Tarragona ha doblado su afiliación en los últimos 3-4 años (aunque
con un número imparable de desempleados), seguramente por la combinación de
diversos factores: por una parte, las circunstancias laborales actuales (gran
cantidad de despidos, impagos, abusos patronales, precariedad,…), por otra
parte, el descrédito creciente de las burocracias sindicales verticales (es ya
mayoría la nueva afiliación proveniente de otros sindicatos), y sin duda
también a una labor sindical constante.
Las secciones sindicales han crecido exponencialmente
abarcando casi todos los sectores y diversas localidades de nuestro ámbito de
actuación; desde el sector público a la gran empresa. Por sectores tenemos
presencia muy variada con secciones sindicales en la hostelería, el metal,
pasando por la química y el transporte, entre otras como en gasolineras, etc.
Muchas de nuestras secciones sindicales son la única
representación sindical en la empresa y en algunos casos se trata de la sección
sindical mayoritaria. Podemos afirmar que nuestras secciones sindicales,
gracias a la coordinación y apoyo del sindicato, son un referente en las
empresas, e incluso muchos delegados de personal o comités de empresa acuden a
nuestras delegados sindicales a pedir asesoramiento y resolver consultas.
No descuidamos tampoco la lucha sindical fuera de la
empresa, en la calle, acudiendo como bloque y con mensaje propio a las diversas
convocatorias de manifestaciones contra las agresiones del Estado y el
capitalismo, o realizando concentraciones propias en otras ocasiones.
En consonancia con la constante programación cultural para
crear opinión crítica y capacitarnos en todos los ámbitos, también se programan
diversas charlas y cursillos relacionados con temas legales y laborales.
Recientemente
tres compañeros han creado un núcleo confederal en la comarca del Penedés. La
televisión de la población tarraconense de El Vendrell se interesó por este
hecho y nos hizo una entrevista que se emitirá próximamente y que será colgada
en Internet.
P.– ¿Ha habido recientemente algún conflicto laboral que destaque
sobre los demás?
R.– En estos momentos tenemos varios
conflictos laborales entre manos. El conflicto de la pastelería Geneve, por
ejemplo, es uno de ellos. El trabajador afiliado a raíz de este conflicto está
dispuesto a utilizar los medios legales a su alcance y la acción directa para
conseguir sus justas reivindicaciones.
A
destacar también las dos recientes victorias en sendos conflictos laborales,
uno de ellos en la empresa Carrefour de la localidad tarraconense de
Torredembarra. El otro éxito ha sido en un conflicto laboral con la empresa
Grúas Creixell.
Actualmente
tenemos, además del conflicto abierto con la pastelería Geneve, un conflicto
abierto con la empresa Balvitrans.
P.– ¿Qué
aspectos positivos y negativos destacarías de tu sindicato?
R.– Como aspectos positivos destacaría
la victoria en conflictos laborales, la importancia que todos y todas damos a
la cultura en la vida sindical, el compañerismo entre los militantes, la
responsabilidad y el compromiso a la hora de trabajar, las aportaciones de
todos según posibilidades y capacidades y el aprovechamiento de las mismas, así
como el respeto en las asambleas pese a posiciones acaloradas. Como aspecto
negativo señalaría que, en relación con la afiliación, la militancia es mucho
menor de lo que sería deseable y que este hecho incide en la actividad del
sindicato, que aun así es alta, sobre todo si tenemos en cuenta que somos
pocos.
P.– ¿Tenéis relación con otras fuerzas
sindicales y/o sociales?
R.– En estos momentos estamos
intentando crear una Asamblea Antirepresiva en la ciudad de Tarragona con
distintas organizaciones. Una asamblea que actúe contra la represión que se nos
viene encima a causa de las nuevas leyes formuladas por el Estado, la de
seguridad ciudadana, el Código Penal. La propuesta partió de CNT Tarragona y ya
se han producido tres reuniones para hablar sobre el tema y parece ser que el
proyecto tirará adelante.
