Como
ya había anunciado el gobierno hace un año, se va a aprobar una reforma
más de las pensiones que pretende empeorar aún más la situación laboral
de tod@s l@s trabajadores y trabajadoras de este país. La reforma
pretende retrasar la edad de jubilación a los 67 años y aumentar los
años para calcularla de 15 a 20 años o incluso toda la vida laboral. Los
expertos calculan que este recorte supondrá una reducción de un 26% de
media en la pensión a recibir.
La
supuesta razón que argumentan para este recorte es que en unos años las
pensiones públicas serían insostenibles, basándose en estudios
supuestamente científicos de economistas que en realidad están al
servicio de la OCDE, bancos y cajas de ahorros. Por el contrario,
estudiosos de la economía como Dean Baker (co-director del Center for
Economic and Policy Research de Washington), Joseph Stiglitz (Premio
Nóbel de Economía), Juan Torres o Vicenç Navarro (Catedráticos de
Economía) sostienen que el sistema público de pensiones será sostenible
durante toda la vida, basándose en la evolución de los datos económicos.
El autor Vicenç Navarro llega a decir que “presentar a organizaciones
de conocida orientación neoliberal, como la OCDE, la Comisión Europea,
o Fedea como instituciones que gozan de credibilidad científica es
equivalente a señalar que el Vaticano y sus argumentos en contra de la
utilización de preservativos como herramienta para prevenir el SIDA
tiene credibilidad científica” y mantiene que el mensaje catastrofista
sobre las pensiones lleva usando los mismos argumentos durante más de 50
años y ya se ha demostrado que es falso, “han ido profetizando el
colapso de las pensiones, retrasando la fecha del colapso cada diez
años, […] en realidad, la Seguridad Social nunca tuvo déficit y continúa hoy teniendo superávit”.
La
verdad es que lo que se pretende desde hace unos años es eliminar poco a
poco el sistema público de pensiones, creando inestabilidad y obligando
al ciudadano a contratar planes de pensiones en algún banco, con los
golosos beneficios que conlleva. Nos parece muy significativo que en la
última reforma laboral se bonificaron al empresario casi todos los tipos
de contrato y que se dé la posibilidad a las empresas de prejubilar a
trabajadores/as (despidos encubiertos), reduciendo los ingresos de la
Seguridad Social. Además, esta reforma también pretende reducir las
tributaciones del Impuesto de Sociedades de las grandes empresas, lo que
reducirá los ingresos de las arcas públicas en 230 millones de euros,
exime del pago del impuesto de transmisiones patrimoniales a las
ampliaciones de capital y privatiza el 30% de las loterías y buena parte
de AENA. Más bien parece que, como siempre, lo que están buscando es
que el trabajador pague cada vez más y el empresario reparta menos de sus astronómicos beneficios.
Lo pueden pintar como quieran, pero esa es la realidad. La prueba de
esto es que cada vez vivimos más apretados: recortes de sueldos,
hipotecas insultantes, reformas laborales, tremendas subidas de precios
(electricidad, combustible, …).
Esta
vía es la que están tomando en los últimos años los dos partidos que se
reparten el pastel electoral en España, haciendo una política
neoliberal que demuestra que quien tiene el verdadero poder son los
bancos y multinacionales. Prueba de ello es que el presidente del
gobierno ha acometido reformas que prometió no hacer en campaña
electoral, aludiendo que son instrucciones del FMI, entidad que nos
venden como la salvaguarda de la economía mundial cuando en realidad es
la representación de los grandes poderes económicos. El dinero manda.
MANIFESTACIÓN 22 DE ENERO. 11:00 HORAS
PLAZA TERRERAS – PLAZA DEL PILAR
CONTRA EL PENSIONAZO Y LOS RECORTES SOCIALES
NO PODEMOS SEGUIR PERMITIENDO ESTE ATAQUE A NUESTROS DERECHOS
PEDIMOS UNA DEMOCRACIA REAL Y UN REPARTO DE LOS BENEFICIOS CREADOS POR NUESTRO TRABAJO
¡DECIMOS NO AL PENSIONAZO Y A LOS RECORTES SOCIALES!
