CNT Logroño vuelve
a reiterar la falsedad de la versión policial que el fiscal repite
punto por punto en su relato de los hechos.
No hay novedades
para dar esa no-noticia ¿a quién se quiere manipular con la misma
mentira?
Como primera
precisión importante se ha anulado la fecha del día 15 de febrero
para el juicio a nuestros compañeros.
Mañana, martes 5
de febrero, a las 12:30h nuestros compañeros tienen que acudir a
declarar al juzgado de instrucción nº 3 de Logroño y suponemos que
será entonces donde el fiscal se ratificará en sus acusaciones y se
fijará nueva fecha para el juicio.
El fiscal se ha
basado exclusivamente en la versión policial, en la cual se ratificó
tras la declaración de Pablo y Jorge, del día 15 de noviembre, sin
estar presente y por lo tanto sin escucharlos.
El fiscal, copiando
la versión de la policía, como mínimo se equivoca en que:
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La manifestación
-para la policía de 14.000 personas, en realidad fue una de las
mayores desde la transición, sino la más numerosa- protestaba
contra una reforma laboral que solo crea paro, los recortes en
derechos y contra una política que asfixia a las personas pero
rescata y protege a los corruptos y ladrones.
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Tampoco eran un
grupo homogéneo de 500 personas de CNT, ni portando distintivos de
ésta, eran bastantes más y gente de todo tipo (edad, condición y
afiliada o no a organizaciones). Las banderas y pancartas se
retiraron una vez que se dio por concluido el discurso de CNT,
recogiendo el material y la megafonía.
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El discurso de CNT
no acabó hasta por lo menos las 21:30 y nuestro compañero Jorge ya
había tenido que partir, sin terminar los discursos, para entrar a
trabajar en el turno de noche en una fabrica a 50 kilómetros de
Logroño.
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La cabecera de la
manifestación llegó antes al Espolón y los discursos de UGT y
CCOO también terminaron antes, y la gente asistente a su mitin se
desplazaba a sus casas. Esas personas (varios miles) fueron
testigos de la desproporcionada actuación policial.
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Al finalizar el
recorrido de la manifestación CNT, como viene siendo habitual,
celebra su acto de cierre frente al Palacete del Gobierno de La
Rioja, custodiado por un grupo de antidisturbios. La calle estaba
cortada, porque no cabía más gente en el Espolón.
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Durante el
comunicado final, tras la caída de un globo de pintura, se pide
expresamente tranquilidad a los asistentes, y se recuerda que es un
acto pacífico. Pero a los minutos de acabar el acto, se inicia una
primera carga indiscriminada y sin previo aviso. (ver vídeo)
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Ahí se produce la
detención de un afiliado de CNT y los primeros heridos. Nuestro
compañero, que ya pasaría todos los sucesos esposado dentro del
coche de policía, en ningún momento lanza piedra alguna, ni echa a
correr, solo sostiene una pancarta en una mano y unas octavillas en
la otra. Es esta actuación la que provoca el enfrentamiento general
con la policía y no al revés
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Los heridos se
sucederán en las siguientes cargas, a las que se suma otro grupo de
antidisturbios procedente de la Delegación del Gobierno. Esas
cargas aumentan en intensidad, sembrando el caos y el pánico, con
el lanzamiento de pelotas de goma a bocajarro y la entrada de
vehículos policiales a gran velocidad, poniendo en peligro la
integridad física de las personas allí presentes.
La versión
“policíaca” solo tiene carácter oficial, o sea, tendenciosa y
de dudosa veracidad; valga como ejemplo, que CNT es un sindicato
asambleario de trabajadores, y no hace falta ser anarquista ni tener
ninguna ideología particular para afiliarse, solo ser trabajador.
Por eso no es de recibo que en una acusación de un fiscal se haga un
juicio de valor político, algo que sí era habitual hace 40 años.
Ya conocemos
recientes versiones oficiales de los “sobres” de dinero y
Bárcenas de turno como para creernos todo.
Sirvan como muestra
la ultima tanda de sanciones administrativas sin fundamento alguno y
emitidas más de dos meses después de la huelga general. De momento
7 con cuantías de 2.800 € cada una.
Secretaría
de Prensa y Comunicación
CNT Logroño
logrono@cnt.es