La CNT en el sector agroalimentario

Aunque lejos de la histórica preponderancia que tuvo en el campo, la Confederación está desarrollando una importante actividad en el sector agroalimentario. No sólo entre los jornaleros de los tradicionales latifundios -donde siguen destacando los sindicatos de Extremadura y Andalucía- o entre los mares de cultivo bajo plástico del poniente almeriense sino también en un novedoso frente el del consumo responsable y agroecológico. No es de extrañar por tanto que la CNT buscase adecuar su posición en el sector desarrollando unos acuerdos específicos en el X Congreso (Córdoba, 2010).

CONTRIBUCIÓN A LA LUCHA CAMPESINA Y AGROECOLÓGICA

Hasta un
10% del PIB de la Región y el 15% de su población activa dependen directamente
del sector primario, cifras muy alejadas del 4 y 5% (2008), respectivamente,
nacionales. El convenio colectivo de trabajadores del campo extremeño es el que
más trabajadores abarca (65.000) pues la comunidad se ha caracterizado
históricamente (junto a Castilla-La Mancha y Andalucía) por el régimen de
propiedad de la tierra (latifundio) y la consiguiente proletarización de la
mayor parte de la masa campesina (jornaleros).

G.P. | Periódico cnt

La CNT extremeña con
una humilde representación en el conjunto del tejido productivo ha redoblado
esfuerzos en los últimos años hacia el sector agroalimentario. Las comarcas con
mayor intensificación agropecuaria y por tanto alta demanda de mano de obra
(Valle del Tiétar y Vegas del Guadiana) concentran la mayor parte de la
población inmigrante de la región sobre todo tras el éxodo a la construcción
por parte de los jornaleros autóctonos desde la década de 1990.

La colaboración con los trabajadores inmigrantes del Campo
Arañuelo arranca hace una década de la mano de la doble militancia de algunos
afiliados en asociaciones de apoyo a los inmigrantes y de la afiliación de
trabajadores con experiencia sindical en su Marruecos natal. En 2006 el
Sindicato de Cáceres Norte organizó una campaña contra el racismo y la
xenofobia ante el conato de organización ultra en Talayuela, epicentro de la
comunidad inmigrante (4.500 personas, un 37% de la población por aquel
entonces). En las elecciones municipales de 2007 un partido de extrema derecha
se convirtió en visagra de gobierno resultando el ayuntamiento español con
mayor representación ultra. En agosto y septiembre de ese año CNT Cáceres Norte
junto a Cáceres Acoge organizan unas jornadas de formación dirigidas a los
inmigrantes con charlas sobre derechos laborales, sociales y ciudadanos por un
lado y estrategia sindical por el otro contando con la presencia de compañeros
olivareros de CNT Pedrera (Sevilla). En octubre de 2007 CNT convoca su primera
huelga en el campo tras muchos años de silencio en el sector. Se trata de un
plante en la recogida del pimiento en Talayuela por la actitud discriminatoria
y autoritaria de un encargado. Los trabajadores deciden tras 5 días de paro
incorporarse al tajo ante la inminencia del fin de la cosecha e incapacidad
para conseguir el abono de las jornadas perdidas pero recibiendo garantías
sobre sus derechos y mejorando las condiciones de trabajo (seguridad e higiene,
encargado…). Los jornaleros del Campo Arañuelo han participado en las dos
últimas ediciones del 1 de mayo cenetista en Mérida mandando sendos autobuses.
El año pasado, 2 de abril, participaron en la manifestación de CNT Cáceres junto
a otros colectivos en lucha contando con la colaboración regional para la
acampada abortada in extremis ante la subdelegación del Gobierno el 4 de mayo,
en lo que podría haber sido el inicio de la primavera “4M” al Norte del
Mediterráneo.

En estos cinco años también se ha desarrollado mucho el otro
frente agroalimentario abierto por la Regional: el del consumo. A día de hoy
todas sedes se han implicado en mayor o menor medida con el consumo responsable
y agroecológico. Organizando charlas y talleres o incluso montando, colaborando
o cediendo infraestructuras a grupos de consumo. Desde Cáceres se impulsó la
creación del grupo autogestionado de consumo GAC Mansalva (2006-2007) para
luego constituir un grupo propio de afiliados (2010). En los locales de Mérida
y Plasencia se reúnen y hacen intercambios otros dos GACs: ConsumoGusto y
Verdolaga. En la sede de Badajoz se realizó en noviembre una comida de
confraternización entre Extremadura Sana (con quién la Regional tiene un
convenio de colaboración) y Banca Ética de Badajoz. Y más recientemente, en
abril, el 15M de la comarca organizó un taller para creación de grupos de
consumo en CNT Don Benito.

En mayo de 2010 CNT participa junto al resto de movimientos
sociales y sindicales alternativos de en la contracumbre de agricultura y
ganadería fruto de la presidencia española de la UE. Aprovechando el evento
sale a la luz el primer número del boletín de la Sección Agroalimentaria de CNT
Cáceres: Campo. En defensa del Campesinado, la Tierra y la Soberanía Alimentaria.
Posteriormente, buscando la coincidencia de otras movilizaciones (semanas de
lucha campesina, día de la tierra) se han editado otros dos ejemplares donde se
ha dado cobertura a gran parte de lo aquí contado así como a luchas sindicales
relacionadas (Mercadona), política agraria comunitaria, o la posición de CNT
ante el problema del campo tras su X Congreso (Córdoba, 2010) ponencia en la
que los sindicatos de la Regional se implicaron especialmente.

En los últimos meses se ha aprobado la creación de una
colectividad de producción-consumo que esperemos pronto eche a andar dando
satisfacción, también, a nuestras necesidades de alimentación y trabajo digno.
Se espera convocar unas jornadas de economía alternativa después del verano en
Badajoz con un formato similar a las de Villaverde Alto en diciembre de 2011
realizadas en gran parte gracias al impulso dado desde Extremadura. Seguiremos
informando.

LA CNT EN EL ÁMBITO DE LA AGROECOLOGÍA

En el X Congreso Confederal actualizamos los acuerdos sobre el colectivismo. Definimos lo que entendemos tiene que ser una Economía Alternativa y sentamos las bases en relación a las características que deben tener los proyectos que desarrollemos o apoyemos. Uno de los sectores de especial relevancia es el de la alimentación ya que es una necesidad universal y por tanto un sector estratégico imprescindible, no solo de cara al cambio social sino también a garantizar los medios básicos de subsistencia.

Qoliya (CNT Valladolid)

Hablar de alimentación en relación al futuro, es hoy hablar de agroecología. Lejos de pretender definir sus diferentes tendencias, señalaré alguno de los ejemplos prácticos vinculados al sindicato.

Como ejemplo más directo, encontramos «La Huerta del SOV», colectivo autogestionado adherido al Sindicato de Oficios Varios de la CNT madrileña. Se funda en febrero de 2009, se desarrolla en Chinchón, lindando con Morata, al sureste de Madrid, en una tierra de 10.000 metros cuadrados. Dicho proyecto es una colectividad de producción-distribución-consumo. Su labor consiste en abastecerse de verduras de temporada. Primero el grupo de producción realiza una planificación técnica de las tres temporadas hortícolas (primavera, verano y otoño-invierno). Después de las siembras y demás trabajos, se hace entre todos los asociados en la medida de su capacidad, procurando que compañeros con menos disponibilidad, asuman funciones administrativas. Se cosecha semanal o quincenalmente y se divide después en bolsas de consumo. Aquellas unidades que consideran que no van a consumirlo todo, donan a una caja común de la que puede abastecerse no solo cualquier unidad de consumo, sino cualquier afiliado al SOV. Al igual que en otros proyectos P-D-C ni se venden ni se compran hortalizas y los medios de producción son colectivos. (Extracto de la revista Habas Contadas).

Otro ejemplo de proyecto vinculado al sindicato sería Bajo el Asfalto está la Huerta (BAH) de Valladolid. Comienza en 2005 al margen del proyecto cooperativo madrileño de mismo nombre. Desarrolla su actividad en tierras ocupadas a una constructora en 2002 y al igual que «La Huerta del SOV» es un proyecto P-D-C. Hay un grupo de trabajo encargado de coordinar y llevar a cabo el trabajo con ayuda del resto del colectivo, que recibe una asignación. Las socias aportan una cuota y un mínimo de dos jornadas de trabajo al mes (otras funciones aparte). También existe la figura de Grupo de Apoyo, que trabaja dos jornadas semanales sin aporte de cuota. Hay secretarías de organización, información, salud, economía y tesorería. El 10% de la cuota va a la caja de salud, de ese 10%, el 45% para posibles accidentes y enfermedades, el 10% para actividades relacionadas con la autogestión de la salud, y el 45% restante en contraprestación tipo finiquito. Se realizan trueques preferentemente planificados, mejor que por excedentes. Nunca se vende productos. Las asambleas unitarias son mensuales (introducción de propuestas con ponencias previas, y orden del día previo la semana antes). Se llevan a cabo talleres trimestrales de agroecología hortícola, abiertos a suscripciones con un bono de ayuda no obligatorio (sistemas de riego, elaboración de purines, planificación…). También se celebran  unas jornadas agroecológicas anuales con charlas y actividades lúdicas.

Desde el ámbito del consumo, un ejemplo sería el Grupo de Consumo de Jaén, que ha realizado un «Cuaderno para el debate», explicando cómo y por qué desarrollan su actividad. Por otra parte está el Grupo de Consumo de Cáceres, que comenzó a funcionar en 2010 como iniciativa del sindicato para satisfacer las necesidades de sus afiliados y afiliadas, sobre todo lo referente a la alimentación, de un modo acorde a los criterios de justicia social, respeto al medio ambiente y salubridad.

HUELGA DE OLIVAREROS EN PEDRERA: LA LUCHA DE LOS JORNALEROS ANDALUCES

El proceso de “descampesinización” que las dinámicas del Capitalismo imprimen en el mundo rural, marginan a la producción campesina, y a sus productores, en beneficio de la gran propiedad, la producción agroindustrial, la alta mecanización, los monocultivos, los transgénicos… que exige un “mercado global” apoyado por los Estados y la Unión Europea en verdadera simbiosis. Así, la Política Agraria Común (PAC) mantiene los privilegios del latifundista; en Andalucía el 3,9 por 100 de los propietarios posee el 54,8 por 100 de la tierra y el 40 por 100 de las subvenciones al campo se lo lleva el 3 por 100 de los grandes productores.

Ignacio Muñiz

Pero esta “adaptación” del campesiando ha sido más formal que real a lo largo de la historia, ya que siempre ha estado presente una cultura de la resistencia caracterizada por la lucha contra la privatización de las tierras comunales, contra la mercantilización de los intercambios, por la defensa de los valores igualitarios, por la subordinación de la tecnología al progreso moral, por la apuesta de la propiedad colectiva con uso individual de los recursos, y por la autoorganización desde lo local con un granescepticismo frente a las formas representativas de la polític, ideario que casó extraordinariamente con el libertario y ananarquista que impulsó, e impulsa, esta resistencia desde mediados del siglo XIX y que tuvo en la CNT su organización principal.

En el campo la CNT, muy menguada tras la feroz represión franquista, la emigración campo-ciudad de los años 1950´-70, y una reforma agraria que ha sido sustituida por el paro agrícola y las subvenciones a a producción de la PAC, ha mantenido no obstante cierto protagonismo en las sucesivas huelgas que ha habido desde la llamada Transición. Ya en 1977 se produce la primera huelga importante propiciada por la CNT, hasta la gran huelga de 1990-91 en que la CNT, como principal impulsora (a través de la Asamblea Permanente de Jornaleros en Huelga, en la que también particpaba el SOC y las CCOO), llegó a paralizar durante más de 40 días el campo de Pedrera extendiendo la huelga no sólo a la provincia de Sevilla sino a las vecinas de Córdoba y Málaga con ocupaciones de fincas, cortes de carretera y encierro en ayuntamientos (como el de Pedrera, al que corresponde la imagen) con una incidencia del 90 por 100 y unas reivinicaciones que se concretaban en el incremento de salarios, reducción de jornada laboral, igualdad en la contratación hombre-mujer, eliminación de las peonadas necesarias para cobrar el subsidio agrario y mejor reparto del trabajo en el Plan de Empleo Rural.

Pero el objetivo final, como siempre ha defendido la CNT, es una reforma agraria que expropie los latifundios y entregue la tierra a los jornaleros para su explotación colectiva, eliminar intermediarios y volver a las explotaciones heterogéneas y autosuficientes, a los mercados locales con productos de calidad… a una relación estrecha entre ser el humano y la Tierra.

CNT ADRA DENUNCIA LA SITUACIÓN EN EL SECTOR DEL MANIPULADO DE FRUTAS Y HORTALIZAS

Con la excusa de la crisis, el miedo al paro, y ahora una
reforma laboral, algunos empresarios del sector están aprovechando para imponer
unas condiciones de trabajo abusivas.

CNT Adra / Redacción

A esta situación hay que añadir el
bloqueo de la negociación colectiva del pconvenio, que perdió su vigencia en agosto
de 2010 (aproximadamente 22.000 trabajadores y trabajadoras tienen sus nóminas
sin actualizar desde 2009), produciéndose la consiguiente pérdida de poder
adquisitivo.

Además, se están vulnerando algunos derechos económicos con
prácticas inadmisibles que van desde cobrar por debajo del salario a
directamente no abonar conceptos salariales establecidos en convenio (plus de
antigüedad a los trabajadores fijos o fijos discontinuos, transporte, pagas
extras, navidad, verano y beneficios. Algunas empresas tampoco abonan la
gratificación de premio a la constancia a los trabajadores y trabajadoras con
10 años de antigüedad. Todos estos incumplimientos suponen una trasgresión de
los derechos económicos pactados que, además de carecer de justificación legal,
permiten a las empresas competir de forma desleal frente a las que tienen un
alto porcentaje de cumplimiento del convenio.

Por otra parte, se están dando situaciones humillantes como
la coacción a la hora de realizar horas extras, facilitada por el excesivo periodo
de prueba (2 meses para el personal no cualificado), lo que propicia todo tipo
de arbitrariedades y una presión constante hacia los trabajadores y
trabajadoras que tienen que someterse para no ser despedidos. Se ha constatado
el despido de numerosas trabajadoras por “no superar el periodo de prueba”
cuando, paradójicamente son veteranas en el sector. Para CNT lo que subyace es
la negativa a realizar horas extraordinarias después de una jornada laboral
ordinaria (que en este sector es de 9 horas diarias). En este sentido el
sindicato, reivindica que el periodo de prueba se limite a 15 días en el
próximo convenio. Además de lo citado, un alto porcentaje de empresas no
entregan la ropa al comienzo de la campaña, o cobran la que hay que reponer, lo
que supone una práctica no solo ilegal sino también de índole inmoral.

Finalmente, desde el sindicato se denuncia la forma que
tienen algunas de estas empresas de disciplinar a las trabajadoras al
obligarlas a limpiar los cuartos de baño cuando esta actividad está claramente
excluida de las funciones del personal del manipulado y reservadas para
personal contratado para la específica de limpieza.

Por estos motivos y ante la demanda de numerosas
trabajadoras, se ha iniciado una campaña con el objetivo de informar a los
trabajadores tanto de los derechos que tienen como de los que son más comunes
de ser vulnerados y además se intentan conseguir casos concretos de
irregularidades, para proceder, garantizando el anonimato de los
interesados/as, a tramitar la oportuna denuncia ante la Inspección Provincial
de Trabajo.

Para ello se han editado más de 10.000 folletos explicativos
donde se indica de qué manera pueden contactar con los distintos sindicatos que
la CNT tiene en la provincia (Adra y Almería) y los piquetes informativos están
recorriendo los centros de trabajo para difundir la campaña.

Al mismo tiempo se pretende acercar la alternativa
anarcosindicalista presentando su genuina forma de organización sindical a
través de secciones sindicales y asambleas de empresa sin la mediación de
comités ni liberados sindicales. No en balde muchas de las irregularidades
descritas se están produciendo en las narices de los Comités de Empresa que no
mueven un dedo por resolverlas.

TRANSGÉNICOS, PASO HACIA LA ESCLAVITUD

Los cultivos transgénicos u OMG (Organismos
Modificados Genéticamente) son la última inversión catastrófica de las multinacionales
para cubrir una necesidad que no existe. Las inversiones multimillonarias en
biotecnología parece ser que no dan los frutos esperados y los gigantes de las
semillas (Mosanto) y los fitosanitarios se ven obligadas a colocar los cultivos
transgénicos a cualquier precio.

Sección Agraria de CNT Fraga

Utilidades de los
transgénicos

Los transgénicos son plantas o animales que no pueden
producirse de manera natural. Son organismos creados a partir de la ruptura de
dos cadenas genéticas para reconstruir una nueva generando una especie que
puede combinar plantas, animales, bacterias, etc. Así pues podemos encontrar
ciruelas que contienen información genética de la vacuna de la gripe, con lo
cual comiendo ciruelas en cualquier época del año nos vacunaremos de la gripe
(o eso dicen, porque cualquiera que piense un poco sabrá que la gripe muta cada
año, que la vacuna no siempre es la misma y que la vida útil de una ciruelo
puede ser de veinte o más años… ¿Resistencias al usar una vacuna ineficaz y
fuera de época?); maíz con información genética de Bacillus Turigensis (con
esto dicen que pretenden proteger al cultivo del taladro, que es un gusano que
ataca el tallo de la planta volviéndola inservible, pero cualquiera que se
dedique a la agricultura sabe que el tratamiento sistemático con un mismo
producto y abusando de él lo que acaba provocando es una resistencia al mismo
por parte de la plaga en cuestión); también la soja resistente a una
determinada marca de herbicida, lo que permite el uso masivo del herbicida que
casualmente comercializa la misma casa que ha creado la soja transgénica; el
tomate resistente a la congelación gracias a los genes del salmón del
atlántico; y otro tipo de productos más inquietantes incluso como los cerdos
con genes humanos, etc.

Esto es fascismo

A pesar de todo ello podríamos pensar que, por irracional que
resulte cultivar transgénicos, y atendiendo a la libertad de criterio y de
empresa, cada uno cultive lo que le dé la gana. Pues bien este es ni más ni
menos que nuestro objetivo. Que cada uno pueda decidir qué y cuando cultivar
una determinada variedad o producto. Los transgénicos se comportan como
cualquier otra planta, es decir, liberan ingentes cantidades de polen durante
la etapa de polinización, lo que implica la contaminación cruzada con otras
especies cultivadas o silvestres. Con lo cual al lado de un cultivo transgénico
no es posible otro tipo de cultivo que no sea transgénico. Esto es intolerancia
y esto es imposición.

Nosotros estamos en contra de cualquier manifestación que
suponga un recorte de libertades y por tanto debemos estar en contra del
cultivo de transgénicos, ya que no permiten la libertad de cultivos. Pero las
empresas productoras de biotecnología no se contentan con contaminarnos los
cultivos, quieren que además les paguemos por ello. Si un campo nuestro se
contamina con transgénicos nos pueden acusar de apropiarnos indebidamente de un
ser vivo patentado, lo que conlleva la correspondiente denuncia y pago de
multas millonarias en virtud de la propiedad intelectual, y esto no es
ciencia-ficción, ya ha sucedido.

También nos dicen que los transgénicos servirán para acabar
con el hambre en el mundo, pero esto es de una estupidez tan sublime que casi
no merece comentarios. ¿Todavía hay alguien que crea que el hambre no es un
problema político y social? El hambre no se acaba con grandes producciones de
alimentos. Los transgénicos no suponen ni un solo kilo más de producción, y sí
un gasto añadido como es la compra de semilla con pago de royalties. La situación
del tercer mundo es como para pagar por semillas. Las semillas deben ser
patrimonio de la humanidad no de las empresas.

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