A todos los trabajadores de la compañía Iberia Líneas Aéreas
Por medio de este comunicado nos queremos dirigir a todos los compañeros que trabajamos en IBERIA, nuestra empresa común.
Como os suponemos ya enterados, el sindicato mayoritario de tripulantes de cabina de pasajeros STAVLA, los sindicatos de trabajadores de tierra CNT y CTA y el sindicato de pilotos SEPLA, hemos realizado una serie de convocatorias de huelga en el mes de febrero, movidos por el objetivo común de conseguir que la creación de Iberia express se haga dentro de la estructura jurídica de Iberia.
Estando convocados paros, para los días 13, 17, 20, y 24, que afectan a los tres colectivos de Iberia y el día 29 por CTA, CNT y SEPLA. Huelgas que han sido legalmente registradas ante las autoridades laborales pertinentes.
Estamos ante una movilización de todos los colectivos de IBERIA, que es histórica y excepcional, acorde con la singularidad de la situación que estamos viviendo en nuestra empresa. En los últimos meses asistimos a una serie de decisiones tomadas por la actual Dirección que nos abocan en un plazo, más corto que largo, a la desaparición de nuestra compañía. Y lo que resulta más hiriente para todos nosotros, que hemos realizado tantos sacrificios por la supervivencia de IBERIA, es que la desaparición de nuestra compañía es una estrategia perfectamente diseñada por nuestros gestores y accionistas, que no tienen ningún escrúpulo en enviar a la mayor parte de los trabajadores al desempleo y en entregar los activos que IBERIA tiene, a la compañía británica British, ante la creencia que con esa marca obtendrán mayores beneficios económicos.
Todos los trabajadores vemos día a día como se vacía la actividad de nuestra aerolínea, entregándosela a Air Nostrum, luego a Clickair/Vueling y ahora a British. La actividad de CARGA que formalmente se gestiona desde IAG ya sólo se opera con los británicos. Se abandonan rutas (Fortaleza, Recife) o estructuras comerciales de IBERIA de numerosos países (Egipto, Nigeria, Angola, Estados Unidos) ahora en manos de British. Se compran con recursos financieros de IBERIA la aerolínea BMI para incorporar sus activos a BA, … y cuántos casos más, que cada uno de nosotros conoce en su área de trabajo.
Esa estrategia de liquidación, si no la impedimos mediante la movilización de los trabajadores, tendrá en la creación de la empresa Iberia-Express la “línea roja” que difícilmente podremos revertir en el futuro. Esta empresa, propiedad de IAG, nace con una estructura ajena a IBERIA, que se sirve de las rutas y de los aviones (40) que deja de operar nuestra compañía, y que, según reconoce el acuerdo firmado por la Dirección y CC.OO. y UGT el 28 de abril de 2010, no modificado por el de 20 de enero de 2012 de los mismos firmantes, realizará los servicios de Handling y Mantenimiento a través de Iberia siempre que “la oferta de ésta lo sea a precio de mercado”.
Por tanto, el reciente pacto del 20 de enero, prolonga la agonía, pero no evita el riesgo de perder 5.000 puestos de trabajo tras el nacimiento de Iberia express, y lo que es peor, legitima la desaparición de Iberia en el año 2015 (si no en 2014). El drama de los trabajadores de Spanair puede repetirse en esas fechas con nosotros, pero no por un fracaso económico de IBERIA, muy lejos de existir antes de que se iniciara la fusión con British, sino por un proceso de liquidación meticulosamente diseñado por nuestros gestores y accionistas.
Trabajador de Iberia, los sindicatos que hoy te convocamos a estas huelgas lo hacemos porque creemos que todos los trabajadores de los tres colectivos unidos podemos detener y corregir estos planes de liquidación, mantener a nuestra empresa viable en el futuro, y recuperar la posición de empresa líder mundial que teníamos antes de comenzar la fusión en IAG. Y al contrario, de continuar con esos planes, y el modelo actual, donde Iberia-Express sería el primero de ellos, nuestra empresa está llamada a la desaparición.
Compañero/a, secunda las huelgas convocadas. Es cierto, tienes algo que perder (dinero), pero mucho más que ganar (trabajo y dignidad). La unión es nuestra fuerza.
Madrid, 7 de febrero de 2012