La sección de forestales de la CNT Vigo junto con las asambleas de trabajadores de distintos distritos del sector forestal de toda Galicia, llevaron a cabo una jornada de huelga el día 25 de septiembre.
El conflicto, que empezó en el pasado mes de agosto tras la muerte de dos trabajadores en la extinción de un incendio en la provincia de Pontevedra, se fue gestando durante el mes de septiembre incluyendo una manifestación en Santiago de Compostela el pasado 11 de septiembre.
Entre los días 11 y 25 de septiembre, se intentó en distintas ocasiones, la negociación con la empresa para la obtención de la totalidad de las reivindicaciones de l@s trabajador@s, entre las que se encontraban la dotación de EPIs adecuados para la extinción de incendios, el reconocimiento de la categoría de bombero forestal, la retirada de la UME (Unidad Militar de Emergencias) de las tareas de extinción o la garantía por parte de la empresa de respetar los 3 meses de trabajo minimos.
A la vista de la fasta de interés por parte de la empresa a sentarse a negociar, la CNT galaica junto con las asambleas de trabajadores, decidieron convocar una jornada de huelga con manifestación para el día 25.
Alrededor de 200 personas acudieron a la manifestación durante la jornada de huelga en la empresa de extinción de incendios forestales SEAGA del
pasado sábado 25 de Septiembre. La manifestación rercorrió las calles de
Compostela desde la Alameda hasta el emplazamiento de la Xunta de Galicia en San Caetano.
Los trabajadores y trabajadoras en huelga fueron comunicando, a lo largo de la manifestacióin, a los compostelanos el nível de precariedad, con claro peligro para su propia integridad física, pudiendo perder la vida,
en que deben desenvolver su trabajo y la necesidad de la creación de un convenio del sector que regule con dignidad las condiciónes de trabajo de su profesión.
La huelga puede ser considerada como exitosa, a pesar de la actitud de la empresa, que continuando con su
comportamento hostil ante cualquier tipo de negociación con este sindicato, llegó a negarse a comunicar a los trabajadores los servizos mínimos. Por su parte, Medio Rural, decretó unos servicios mínimos
abusivos que en algunos distritos superaba el 50%, mientras que en muchos otros era del 100% en el mismo momento en el que la temporada casi toca a su fin y muchos de los trabajadores temporales (en realidad fijos-discontinuos no admitidos) son rescindidos de contrato porque, según la empresa, ya no hacen falta. Ademas, merece la pena reseñar el papel de la central sindicalista regional de carácter nacionalista CiG, que ofreció su ayuda a la asamblea de trabajadores en un principio, para después negarse a apoyar cualquier convocatoria de huelga mientras la campaña de extinción no acabara definitivamente, lo cual, tampoco sorprendió demasiado a la asamblea ya que no confiaban en ellos por anteriores situaciones en la empresa.
La lucha en SEAGA no ha hecho nada más que empezar. La CNT continuará denunciando las
condiciones de trabajo en el sector y reclamando la necesidad de que Medio
Rural y SEAGA se sienten a negociar un futuro convenio del sector.
