Ya son conocidos por todos los trabajadores de la
enseñanza pública los fortísimos recortes de la Consejería de Educación,
pero todavía no son conocidos, ni mucho menos, por el resto de la
comunidad educativa. Ni los alumnos/as, ni los padres/madres de éstos
son conscientes de los nuevos recortes que explicamos de manera muy
concisa en el comunicado “Cerca de 3.000 trabajadores de la enseñanza
pública a la calle” y que suman a la larga lista de los realizados en
los últimos años como del verano del 2010 que dejaron a otros 3000 en la
calle.
Una lectura atenta de las
instrucciones de la Consejería de Educación del pasado 5 de julio nos
debería alertar sobre las nefastas consecuencias que van a tener los
recortes que tras ellas se esconden.
De forma muy resumida, estos recortes suponen:
– Para los trabajadores interinos: el paro y un adiós
a la enseñanza pública. Desde la incertidumbre ocasionada por estas
medidas, difícilmente se puede esperar una reincorporación a la
actividad docente al quedar suprimidos miles de puestos de trabajo. Por
otra parte, en esta tesitura los opositores sean trabajadores interinos o
no, pueden ir olvidando una oposición para el año que viene (y quién
sabe por cuanto tiempo, o para siempre) pues según esta medida sobramos
trabajadores de la enseñanza a centenares.
– Para
los trabajadores de la enseñanza funcionarios de carrera: la
incertidumbre y un incremento desmesurado de alumnos por profesor. Para
sorpresa de muchos, las nuevas instrucciones han dejado a una cantidad
enorme (quizás más de 1000) de trabajadores de enseñanza funcionarios de
carrera en situación de expectativa sin destino, es decir, sin
instituto donde trabajar en el inicio de curso. No sabemos si eso
significará que estos trabajadores tendrán que realizar sustituciones
como venían haciendo los interinos. En cualquier caso, su situación es
kafkiana, pues la consejería tiene ahora mismo a la espera de las
vacantes surgidas en septiembre por jubilaciones (en cifras que en
ningún caso podrán servir para recolocar a todos estos trabajadores) un
número de trabajadores en nómina para los que no tiene puesto de
trabajo. Como no sabemos por dónde se encaminarán sus pasos para el
desmantelamiento de la enseñanza pública suponemos que estos
trabajadores no deben extrañarse si en un tiempo a esta parte podrían
empezar a pensar en una posible excedencia forzosa como nuevo varapalo a
recibir en nuestro ya debilitado costado.
Para los trabajadores de
la enseñanza que no se que queden en el paro o sin destino, sufrirán los
brutales recortes de medios que se traducirán en muchos más estudiantes
por profesor y menos recursos que nunca: desdobles, compensatoria, etc.
–
Para los estudiantes y padres/madres de estudiantes: supondrá un
deterioro que hará que muchos alumnos/as estén en condiciones tales que
no podrán tener envidia de sardinas enlatadas. Por no hablar de
reducción de plazas en los ciclos formativos, escuelas de idiomas,
atención a la diversidad, desmantelamiento de la tutorización, etc.
Evidentemente,
todo esto es un esbozo de un golpe que provocó la afluencia masiva a la
asamblea convocada por los sindicatos subvencionados el pasado 20 de
julio en el IES Beatriz Galindo. Esta asamblea con un Orden del Día
disperso se convirtió en un foro en el que se vertieron decenas de
propuestas que los trabajadores allí dejaron como muestra de su
indignación pero que acabaron encauzadas en una discusión sobre el
asunto “no comenzamos el curso” que contaba con los partidarios de
empezar las movilizaciones el 1 de septiembre o los partidarios de
comenzarla con el curso ordinario a mediados de septiembre. Se convirtió
en mayoritaria la opción que apostó por una movilización continuada y
sostenida en el tiempo nacida desde las asambleas de centros y las de
zona, es decir, protagonizada por los trabajadores y que tomara impulso a
través e diversas movilizaciones en septiembre con una gran protesta el
día 14.
Ante todo esto el Sindicato de la Enseñanza e
Intervención Social de CNT-AIT Madrid hace un llamamiento a participar
en toda convocatoria para luchar contra este golpe a los trabajadores y
estudiantes de las enseñanzas públicas madrileñas:
Acudamos a la
asamblea provincial del próximo día 31 de agosto (a las 11 horas en el
Salón de Actos de Comisiones Obreras. Calle Lope de Vega, 40) y digamos
bien claro que frente a un golpe como este solo hay una respuesta
posible: LA HUELGA INDEFINIDA.