Con el lema “Hacer sindicalismo no es delito” la CNT se moviliza en todo el estado para manifestar y denunciar, en la calle y en los medios, su gravísima preocupación ante la situación judicial de seis militantes sobre las que pende una condena de cárcel de tres años y medio además del pago de una indemnización de 150.000 euros: ¿cuál ha sido su delito para tal condena? Hacer sindicalismo, escuchar y apoyar a una compañera explotada y acosada que pidió ayuda. Mujeres que ayudan a mujeres.
El conflicto se inicia cuando la CNT, que había asumido la defensa de la joven trabajadora, reclama el pago de las cantidades que en ese momento se le adeudaban y poner punto final a la relación laboral, dada la situación de explotación laboral y acoso que vivía, insoportable para la trabajadora.
Ante la negativa de diálogo por parte de la empresa la CNT inició una serie de movilizaciones, las habituales en estos conflictos, comunicadas oportunamente, y que discurrieron entre los meses de mayo y septiembre del 2017, mes en el que el empresario vendió su negocio, a la venta desde mayo del año anterior; un año antes que comenzara el conflicto laboral y que, sin embargo, las dos sentencias atribuyen a la acción del sindicato.
La reacción del empresario a las movilizaciones fue una cascada de denuncias, la mayor parte archivadas, y el requerimiento constante de la policía, que en ningún momento tuvo necesidad de intervenir en las concentraciones, que se desarrollaban con total normalidad.
De esas denuncias, nos encontramos hoy, a la espera de la admisión a trámite de un recurso de casación ante el Tribunal Supremo, con una durísima sentencia, confirmada por la Audiencia Provincial, en la que se condena a las seis de Xixón a penas de prisión de tres años y medio, además de el pago de una indemnización de 150.000 €, por delitos de coacciones graves, amenazas y obstrucción a la justicia.
Por eso estamos hoy aquí, en la calle, para denunciar que la actividad sindical, que ni siquiera exigió la intervención de la policía, puede llevar al ingreso en prisión de seis sindicalistas, truncando sus vidas, por haber apoyado, confortado y ayudado a una mujer trabajadora.
No podemos permitir que se ataque los derechos civiles, la libertad de expresión y de manifestación. La gravedad de las condenas es un ataque directo a cualquier forma de protesta social que siga apostando por la presencia en la calle como vía de defensa de los derechos. Nos quieren solas y sumisas; pero nos encontrarán unidas y combativas.
Frente a esta situación represiva que nos afecta a todas y que puede crear un peligroso precedente, nuestra mayor defensa es la solidaridad, son muchas ya las asociaciones, sindicatos y colectivos que se han adherido al manifiesto de apoyo en defensa de las libertades sindicales, más de 171 organizaciones, y esperamos seguir sumando.
Hacer sindicalismo no es delito, y por ello nos movilizamos. La CNT llama al conjunto de la ciudadanía y al tejido social, vecinal y sindical de nuestras ciudades y pueblos a asumir como propia la defensa de “Las Seis de La Suiza” y que participen en la jornada de movilizaciones este próximo 19 de noviembre en apoyo a las encausadas de CNT Xixón.