Se ha publicado un nuevo número de Germinal. Revista de Estudios libertarios, ambicioso proyecto de publicación que tiene como intención cubrir un vacío existente dentro de la historiografía anarquista y que, como especifica en su Carta de la Redacción, busca convertirse en una referencia clave en el pensamiento libertario. Su primer número vio la luz en abril de 2006 y su periodicidad es semestral, aunque ha tenido varias etapas en las que se ha actualizado la publicación y adecuado a los requisitos de una revista científica.
El número 12, con fecha de juliio-diciembre de 2014, tiene los siguientes contenidos:
«La influencia de Mijaíl Bakunin en España», de Juan Pablo Calero Delso:
Parece una certeza, más allá de toda duda, que Mijaíl Bakunin fue en muy buena medida responsable de la adscripción mayoritaria del movimiento obrero ibérico al anarquismo. Como a raíz de la visita de Giuseppe Fanelli se ha considerado que la influencia de Bakunin en España fue decisiva, nos proponemos en este artículo delimitar el eco real del anarquista ruso en el primer obrerismo hispano.
«Prostitución, perspectiva y propuesta libertarias», de Elena Villarreal
En el debate acerca de la prostitución, se encuentran dos supuestos bandos enfrentados. Uno, obvia el grave perjuicio que se comete contra las prostitutas en su lucha contra la prostitución, y otro confunde el apoyo a la prostituta con el apoyo a la prostitución, como si fuera una actividad económica tan neutra como cualquier otra, dentro del sistema de explotación capitalista. Por una serie de motivos, tales como la construcción de la sexualidad según el género, la todavía desigualdad entre hombres y mujeres, así como la influencia que ha tenido la posmodernidad y el liberalismo en el concepto de sexo y libertad, se trata de una explotación especial con matices específicos. Muchos son los tratados sobre la moralidad o inmoralidad de las putas, y sin embargo, se ha naturalizado y dado por sentado, como normal, el comportamiento de los hombres al comprar sexo.
«Élisée Reclus, teoría geográfica y teoría anarquista», de Philippe Pelletier
Demostración de que Reclus, a través de su obra geográfica, estableció un auténtico tratado de geografía, contra la opinión ampliamente difundida de sus detractores.
Con sus alusiones al medio, que resulta clave en su discurso geográfico, llega a preconizar la mesología o ciencia de los medios, enlazando con filósofos como Pascal, Diderot y Newton.
Aboga por una ciencia geográfica al servicio del anarquismo, ya que la combinación de geografía y anarquismo permite reflexionar sobre la situación del mundo para así poder aportar soluciones para remediarla, deja bien claro que cualquier posible solución tiene que pasar necesariamente por la realización de la revolución social.
«La organización armada anarquista, debates y propuestas durante la II República española», de Roberto Martínez Catalán
La II República fue para el movimiento anarquista español un periodo rico en debates sobre la organización armada. Al calor de las diferentes insurrecciones obreras fracasadas tuvo lugar un proceso de redefinición de la estrategia insurreccional, abandonando la “gimnasia revolucionaria”, el voluntarismo y la improvisación para valorar más la preparación y las condiciones existentes. Esto se plasmó en la creación de los Comités de Defensa y de Preparación Revolucionaria, organismos que además de constituir una vanguardia combativa debían sobre todo planificar la insurrección. Asimismo, advirtiendo las difíciles circunstancias en que iba a desenvolverse la revolución en sus inicios, aparecieron propuestas encaminadas a formar un ejército revolucionario; en especial la de García Oliver, rechazada ante el peso del tradicional antimilitarismo.
Además, se hace una reseña de la revista Estudios, surgida por iniciativa de la Confederación Nacional del Trabajo, y de los siguientes libros: El mito bolchevique, de Alexander Berkman, La Comuna de París, de Louis Michel, La Ruche. Una experiencia pedagógica, de Sébastien Faure: Anarquismo es movimiento. Anarquismo, neoanarquismo y postanarquismo, de Tomás Ibáñez y El hombre, Dios y el Estado. Contribuciones en torno a la cuestión de la teología política, de Aníbal D’Auria.