El sector de medios de comunicación de videojuegos tiene cada vez más audiencia ante el aumento del consumo de las noticias relacionadas con ellos. Pero el aumento exponencial de la oferta informativa no se ha traducido en mejores condiciones para los profesionales, que ya no solo no tienen contratos en su gran mayoría sino que muchos trabajan a cambio de futuras remuneraciones. Hablamos de una industria que, en 2018, facturó 813 millones de euros solo en España.
Unos ingresos que no se traducen en mejoras en las condiciones de trabajo: Falsos autónomos, trabajadores sin contrato… que afectan a las decenas de colaboradores con las que cuenta alguno de los medios del sector, en muchas ocasiones alegando que poder jugar al videojuego ya es motivo de sentirse pagado.
Un sector cuyos trabajadores, especialmente las mujeres y la gente LGTB+, están además expuestos al acoso y la agresión en redes sociales a manos de una ultraderecha que ha encontrado en ciertos segmentos del mundo gamer una cámara de eco para sus ideas.
Tras el éxito del hashtag #GamePressPaidMe, donde los profesionales del sector se lanzaron a publicar las bajas tarifas que estos pagan, las secciones de Prensa y Medios de Comunicación de CNT Madrid y CNT Barcelona se están organizando para agrupar al máximo número de profesionales y realizar una estrategia conjunta para combatir la precariedad de un sector donde un asalariado es casi un privilegiado.
Si eres uno de estos trabajadores que se hayan visto afectados por publicar información referente a su situación contractual o sus tarifas, contacta con el sindicato y denuncia tu situación.