Ya hace casi un año que comenzó este conflicto y FUTBOLCONER
SL se sigue negando a dar una solución al despido injustificado de nuestro
compañero Álvaro. No sólo eso, sino que ha incrementado la represión contra cualquiera
que haya solicitado el cumplimiento de sus derechos laborales. Despidos
camuflados bajo el formato de “no renovaciones”, coacciones, problemas a la
hora de solicitar las pertinentes vacaciones o días de descanso… Todo perlas en
una empresa que ha perdido los papeles.
Por eso hoy hemos querido darle un toque de color a la Puerta del Sol, y nuestros
habituales piquetes mensuales se han transformado en toda una mañana de
reivindicación alegre y deportiva, en la que hemos goleado contra la precariedad
de la empresa. Bajo el lema “Métele un gol a la precariedad”, con una pequeña
portería montada junto al número 5 de Sol donde se haya ubicada la tienda, más
de una docena de jóvenes y no tan jóvenes han querido chutar en solidaridad con
los y las trabajadoras. El saldo de la jornada han sido 600 panfletos
informativos distribuidos, 200 firmas contra los abusos patronales y por la
readmisión de nuestro compañero, y más de una docena de goles.
Desde la tienda, como siempre, ha reinado la crispación y el
nerviosismo ante nuestra presencia y además, en este caso, la falta de
educación y todo respeto. Insultos, amenazas, etc., para entorpecer nuestro
legítimo derecho a la concentración y al piquete informativo de esta jornada,
ante la presencia de la
Policía Municipal. En este caso nuestra acción en Madrid ha
sido respaldada y complementada por los compañeros del sindicato de Barcelona,
que no han querido dejar pasar la convocatoria sin mostrar su solidaridad realizando un piquete
informativo en la tienda de Barcelona.
Finalizada la mañana y sus reivindicaciones, nos hemos
despedido como siempre (“Ahora nos vamos, pero volveremos”), porque aquí vamos
a seguir hasta que se respeten los derechos de los trabajadores y las
trabajadoras de la tienda, y el conflicto sindical seguirá hasta conseguir la
readmisión de nuestro compañero Alvaro.
