«La sentencia del TSJ de Madrid sobre
Madrid Río afirma que al ser un contrato público, las ganancias están
fijadas de antemano y no se puede aducir pérdidas inesperadas. Desde CNT
afirman que en muchos de los contratos públicos no se cumplen los
pliegos de la adjudicación e insta al Ayuntamiento de Madrid a que
revise su cumplimiento»
«el juez ha aceptado
todos los argumentos que presentaron desde la defensa de CNT para que se
declarara nulo el ERE. Uno de ellos fue la violación del derecho de huelga de los trabajadores,
ya que, durante los 26 días de paros que los trabajadores hicieron en
diciembre de 2014 y enero de 2015, la empresa llevó a trabajar al
parque de Madrid Río a trabajadores de otros parques también bajo su
gestión. La sentencia está condenada a admitir a los trabajadores y a pagar los sueldos y la seguridad social
de los cerca de siete meses transcurridos desde que fueron despedidos.
La readmisión será obligatoria aunque decida presentar un recurso contra
la sentencia, que no es firme.
Periódico Diagonal (14-07-2015)
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJ Madrid) señala que
los expedientes de regulación de empleo son herramientas excepcionales
que sólo se deben utilizar cuando la empresa sufra pérdidas por causas
sobrevenidas, “no por causas provocadas”. Según señala Juan Rubiño, uno
de los abogados de Red Jurídica que representan a CNT en el conflicto
laboral de Madrid Río, la sentencia del alto tribunal subraya que el
contrato de la UTE Raga-Nitlux para la limpieza de Madrid Río es
público, en el que las cantidades que la empresa percibirá cada
año están decididas de antemano, por lo que “la empresa no puede aducir
una pérdida inesperada de ganancias”.
“Estamos en un contexto en torno a la crisis en el que se ha legislado en contra de los trabajadores. Se realizan prácticas abusivas en torno a los expedientes de regulación de empleo con connivencia de la Administración,
que quiere bajar los costes del servicio mientras la empresa degrada
las condiciones laborales”, continúa Rubiño. «Los jueces están
corrigiendo ahora los desmanes de las reformas laborales y de los
recortes”, continúa. Entre estos desmanes, el abogado destaca que,
mientras antes en la Comunidad de Madrid, en los contratos públicos se
imponía el número de trabajadores que debía formar la plantilla que
tenía que cumplir los servicios contratados, en los últimos años, el
Consistorio de Ana Botella prescindió de fijar el número de trabajadores, por lo que las empresas empezaron a bajar el precio del servicio a base de disminuir plantilla. “Esta sentencia pone coto a esta práctica”, subraya Rubiño.
El abogado destaca también que en la sentencia, el juez ha aceptado
todos los argumentos que presentaron desde la defensa de CNT para que se
declarara nulo el ERE. Uno de ellos fue la violación del derecho de huelga de los trabajadores,
ya que, durante los 26 días de paros que los trabajadores hicieron en
diciembre de 2014 y enero de 2015, la empresa llevó a trabajar al
parque de Madrid Río a trabajadores de otros parques también bajo su
gestión. La sentencia está condenada a admitir a los trabajadores y a pagar los sueldos y la seguridad social
de los cerca de siete meses transcurridos desde que fueron despedidos.
La readmisión será obligatoria aunque decida presentar un recurso contra
la sentencia, que no es firme.
Legitimidad de la asamblea de trabajadores
La sentencia también incide en legitimar a los trabajadores organizados en asamblea al margen de los comités de empresa, siempre
y cuando representen a más del 10% de la plantilla. Un punto que, según
apunta Rubiño, no suele contemplarse en la mayoría de sentencias, y que
podría hacerse más habitual en el futuro.
La unión temporal de empresas formada por Raga y Nitlux consiguió el contrato para la limpieza de limpieza de Madrid Río por 111,8 millones de euros en noviembre de 2014, un 37% menos que el importe de licitación.
Un mes después, presentó un ERE para eliminar 127 puestos de trabajo,
la mitad de la plantilla. Los trabajadores de Madrid Río emprendieron
una huelga de 27 días, que fue boicoteada desde la empresa, que ordenó a
trabajadores de otros parques bajo su gestión asumir las tareas en
Madrid Río. Mientras estaba abierta la mesa de negociación, mandó una
carta a los trabajadores de Madrid Río afectados por el ERE
ofreciéndoles la posibilidad de mantener su puesto de trabajo a cambio
de una degradación de sus condiciones laborales –cambiando su contrato
indefinido por un fijo-discontinuo. 37 de ellos trabajadores aceptaron
las nuevas condiciones. En la sentencia del TSJ Madrid señala también
que la empresa cayó en contradicciones al ofrecer mantener los puestos
de trabajo a la vez que presentaba un expediente de regulación de
empleo.
“Estar organizado funciona, y cuando volvamos a la empresa tenemos que seguir organizados,
sin bajar la guardia”, señala Antonio Manzano, delegado sindical de CNT
en la UTE Raga-Nitlux. Por su parte, Mario Aragón, de la Secretaría de
Acción Sindical CNT, explica que “este caso hay que enmarcarlo dentro de algo más grande, en la externalización de los servicios públicos que se está llevando a cabo desde hace años”.
Aragón enumera los diferentes conflictos derivados de la
precarización de las condiciones laborales que han venido con la
externalización. Es el caso de los bomberos de Infosa o los trabajadores
de Virensis, “que tienen las condiciones más precarias que te puedas
imaginar, donde incluso han despedido a todos los delegados sindicales; o
de los trabajadores de la cultura en los centros culturales de la
Comunidad de Madrid que trabajan para Clece… La lista de conflictos por externalizaciones de servicios es enorme”, concluye.
Desde CNT, CGT y trabajadores de empresas que también están viviendo
conflictos laborales, como Movistar o Coca-Cola, han convocado una manifestación bajo el lema ‘Unificando luchas’ esta tarde, a las 19h30, de Plaza de España hasta Callao.
Remunicipalización de servicios
Desde CNT señalan la posibilidad de pedir una reunión con la actual concejal de Medio Ambiente,
Inés Sabanés, para que vigile con la empresa gestora de Madrid Río el
cumplimiento de las condiciones de trabajo. También ponen sobre la mesa
la negociación con el Ayuntamiento para que, cuando admita a una
empresa, antes compruebe que ésta puede cumplir con sus responsabilidades con los trabajadores, que se de preferencia a las cooperativas o “incluso que se contemple la remunicipalización de estos servicios”, añade Aragón. “El 90% de estas empresas no cumple con los pliegos, y eso es algo que la propia Administración tiene que vigilar”, añade.
Raga-Nitlux tiene la gestión de la limpieza de cinco grandes parques
de Madrid. Madrid Río fue el último contrato que consiguió, y el más
cuantioso. También es donde ha aplicado todos los recortes, a pesar de que, al ser el más grande, es el que presenta más necesidades de trabajo. El contrato lo tiene por ocho años, aunque, como señala Rubiño, se podría rescindir si se demostrara que la empresa incumple de forma grave los pliegos de la adjudicación.
Algo que los trabajadores de Madrid Río ven claro, pero que tendrían
que confirmar los funcionarios del Ayuntamiento.“Sospechamos que los índices de calidad que marcan los pliegos de la adjudicación no se están cumpliendo, a la vista de que eliminaron a la mitad de la plantilla”, afirman varios trabajadores de Madrid Río.
“Hay muchos otros casos en los que no se están cumpliendo los pliegos”,
afirma Aragon, “como en el caso de las animadoras socioculturales en
centros de mayores o con la empresa de servicios sociales Humanus. Es la
tónica normal, y lo increíble es que la propia Administración no tenga herramientas para ver si se cumplen o no los pliegos”, concluye.