Primeramente una pequeña introducción: los trabajadores de Virensis somos fijos discontinuos, ¿esto qué quiere decir? Que como durante los meses de verano se suspenden las actividades en los centros de mayores donde trabajamos, firmamos una baja a mediados de junio en la cual nos tienen que pagar las vacaciones no disfrutadas de todo el curso. Durante los meses de julio, agosto y septiembre estamos en el paro y a mediados o finales de septiembre la empresa tiene la obligación de llamarnos para que firmemos de nuevo el alta para en octubre volver a nuestros puestos de trabajo con las mismas condiciones, ¿las mismas? Sí, las mismas, como somos fijos cada uno sigue en los talleres donde estaba el año pasado, no pueden modificar las cláusulas del contrato y menos si es para empeorar las condiciones laborales de sus trabajadores.
Aclarado esto comencemos: a finales de junio del 2015, varios de los trabajadores de Virensis se dieron cuenta de que en sus nóminas de junio, en las que tendrían que estar incluidas sus vacaciones, estas no estaban. Cada vez que uno de ellos pedía explicaciones a la coordinadora sobre este hecho, ella se excusaba diciendo que debía de ser un fallo de la gestoría y que enseguida lo arreglaban, tardando 15 minutos en arreglar dicho fallo. Esto ocurrió con varios trabajadores, los cuales firmaron no conforme en la nómina “mala” y en la “buena”, es decir, en la que ya venía incluido el importe de sus vacaciones. Esta firma no conforme se debe a que, como ya hemos informado antes, estos trabajadores llevan todo el año cobrando por debajo de lo que pone en su convenio. Durante las dos o tres semanas, aproximadamente, que duraron estos fallos, una tarde fuimos a firmar sus finiquitos varios trabajadores a la vez, entre ellos miembros de la sección sindical de la CNT-Virensis, de los cuales además, cuatro de ellos están significados. Casualmente las nóminas de estos cuatro trabajadores si tenían incluidas las vacaciones, pero las de los demás no, así que ellos explicaron a sus compañeros como proceder y reclamar sus vacaciones. Todo esto sucedió con una actitud tranquila y de respeto por parte de los trabajadores y gente de la oficina, todas las preguntas y respuestas se sucedieron en un tono cordial a la par que informal, incluso en los momentos en que las coordinadoras y trabajadoras de la oficina se vieron desbordadas y agobiadas por tener que solucionar tantos supuestos fallos a la vez.
Los días 8 y 10 de julio de 2015 dos miembros de la sección sindical CNT que venían luchando por los derechos de la plantilla, reciben dos burofaxes de la empresa en los que se les comunica “que por conducta inadecuada proceden a la extinción de su contrato laboral como trabajador fijo-discontinuo”. Entendemos que lo que subyace detrás de estos despidos es que la empresa considera que el hecho de que sus trabajadores reclamen sus derechos y sus sueldos, quieran respuestas de porque la empresa no deja de cometer un fallo tras otro y que estos fallos siempre perjudiquen al trabajador y no a la empresa e informen de todo ello a sus compañeros, es “una falta muy grave de orden laboral, consistente en ofensas verbales o físicas al empresario y una transgresión de la buena fe contractual y abuso de confianza en el desempeño del trabajo”.
Desde la creación de la sección habíamos enviado varios burofax pidiendo una reunión con la directiva de la empresa sin obtener respuesta ninguna por parte de ésta, así que se aprovecharon los momentos en los que se hablaba con las coordinadoras, tanto por mail, teléfono o en persona, para comunicarles nuestras quejas y que ellas se las transmitieran a sus superiores. A estos compañeros se les acusa de intentar crear conflicto cuando lo que han estado intentando, junto con los demás miembros de la sección, ha sido intentar dialogar con la empresa.
Estos despidos son claramente un castigo en respuesta a las acciones sindicales que se llevaban realizando desde la creación de la sección, y en respuesta a ellos hicimos varios piquetes informativos en la sede de Virensis, (calle Caleruela nº 79, 3º, en Madrid) durante los días 13 y 15 de julio. El primer día, dos de los secretarios de la CNT de Villaverde intentaron subir a las oficinas para hablar con los responsables de los despidos, pero cuál fue su sorpresa cuando no pudieron pasar ni de la entrada del edificio, porque el conserje tenía orden de no dejarnos pasar para subir a la oficina, así que continuamos en la puerta del edificio con nuestra pancarta, nuestro megáfono y repartiendo pasquines informativos a la gente que pasaba por la calle y a los trabajadores de otras empresas situadas en el mismo edificio, que bajaron a interesarse por el conflicto, denunciando los despidos de nuestros compañeros y la situación tan precaria que llevábamos sufriendo desde octubre de 2014.
El día 15 volvimos para intentar hablar con ellos otra vez, pero otra vez nos ignoraron, no quisieron hablar con nosotros, pero lo que sí hicieron, al igual que el primer día, fue llamar a la policía para que nos echara de allí. Los agentes que vinieron ambos días nos preguntaron por el conflicto, nosotros se lo explicamos y al comprobar que no estábamos haciendo nada ilegal se marcharon.
Junto con estos piquetes, el día 14 de julio, participamos en la manifestación “Unificando luchas” junto con compañeros de otras secciones sindicales de CNT y de otros sindicatos con conflictos similares al nuestro, y allí dimos a conocer nuestra situación de manera resumida.
Tras no obtener respuesta, nuestros compañeros, acompañados y asesorados por nuestros abogados en la CNT de Villaverde y la gente de acción sindical, decidieron poner una papeleta de conciliación por la vía legal y judicial. Dicha conciliación se celebro el día 24 de agosto, y a ella acudieron los abogados de Virensis, los cuales no quisieron saber nada ni de readmisión ni de indemnización por despido improcedente, no dejando otra opción a nuestros compañeros que demandar a la empresa. La demanda fue puesta el 26 de agosto y aún siguen a la espera de que salga el juicio.
Pero ahí no se acaba la cosa: curso nuevo, nuevas jugarretas de Virensis. Varios compañeros, casualmente todos habían firmado no conforme en la nómina-finiquito de junio, empezaron a recibir burofaxes en los que se les comunicaba “que por circunstancias organizativas, no podían contar con ellos para el curso 2015-2016, por lo que no procedían a efectuar llamamiento alguno”. Consideramos estos despidos encubiertos, camuflados como una no-renovación, ilegales. Los talleres de estos compañeros siguen funcionando, con lo cual, al ser fijos- discontinuos, no pueden prescindir de sus servicios por causas de organización ¡¡¡son sus puestos de trabajo!!! Con algunos de ellos incluso se habían puesto en contacto para confirmar horarios y fecha de comienzo de sus talleres para días después prescindir de sus servicios, otros tenían sustituto incluso 10 días antes de recibir el burofax y la empresa apuró hasta casi el ultimo día para prescindir de ellos ¿qué tipo de organización es esa? Una muy desastrosa.
Además de esto, no avisaron a los centros de los cambios con 15 días de antelación, infringiendo de nuevo la normativa al respecto, quedando demostrada una vez mas la mala gestión, desorganización o dicho de una manera más coloquial “el morro que le echa Virensis para hacer lo que le da la gana pasándose por el forro convenios y leyes impunemente”.
Pero los compañeros que siguen en la empresa, lejos de mejorar su situación, siguen sufriendo las fechorías de ésta. Los primeros que firmaron el alta, se encontraron con que habían modificado la cláusula del contrato en la cual pasaban de incluir el prorrateo de las pagas extraordinarias en el ya precario y por debajo de convenio precio hora, a incluir también el prorrateo de las vacaciones e indemnización por finalización de contrato, reduciendo así su salario de manera notoria. Tras comunicárselo a la empresa…¡sorpresa! Ha sido un error, lo modificaremos, perdón por las molestias, etc, etc… Y esto les sucede a los afortunados que han firmado el contrato, porque a día de hoy, y después de llevar semanas trabajando, hay compañeros que todavía no han firmado el contrato.
La gente se preguntará, ¿pero cómo es posible que una empresa que contrata la Comunidad de Madrid para que se encargue de los talleres de sus centros de mayores, puede cometer tantos supuestos errores e irregularidades y que no solo no sea amonestada, sino que encima continúe durante otro año con la adjudicación de estos servicios?
Desde la sección sindical de CNT-Virensis llevamos preguntándonoslo mucho tiempo, el día 12 de mayo de 2015 hicimos un piquete informativo en la Conserjería de Políticas Sociales y Familia y el Registro de la Agencia Madrileña de Atención Social, en Agustín de Foxá nº 31, con nuestra pancarta, nuestro megáfono y nuestros pasquines informamos a toda la gente que pasaba por allí, y muchos de los trabajadores de la Comunidad que trabajan en ese edificio nos mostraron su apoyo y nos dieron la razón, pero ningún cargo se dignó a bajar a hablar con nosotros.
Recientemente, el día 2 de octubre de 2015, hemos llevado una carta a esta misma sede, la cual ha sido entregada y sellada con registro de entrada, en la que informamos a la Comunidad de todo lo acontecido hasta ahora entre Virensis y sus trabajadores, y exigiéndoles responsabilidades y ayuda, ya que son ellos los que adjudicaron el proyecto a Virensis, siendo así cómplices de todas las irregularidades e ilegalidades que realiza esta empresa si no hacen nada al respecto por solucionarlas.
También hemos mandado un burofax a la empresa, el día 9 de octubre, solicitando una reunión para tratar cuanto antes el tema de los despidos y las situaciones precarias que llevamos sufriendo desde que empezamos a trabajar con ellos hace ya un año. Esperamos obtener respuesta, ya que estamos ofreciendo continuamente un marco de diálogo.
Con este escrito, además de informar de nuestra situación, queremos aprovechar para seguir pidiendo vuestro apoyo y dar las gracias a toda la gente con la que contamos: familiares, amigos, alumnos, y sobretodo a los compañeros de la CNT, que nos ayudan, nos aconsejan y luchan con nosotros, en sus conflictos y en el nuestro. Porque está claro compañeros, que la unión hace la fuerza y que nuestra historia la hace la solidaridad.
Sección Sindical Virensis
Federación Comarcal Sur
