CNT A FONDO: SECCIÓN DEL TAXI
En este número hablamos con Ginés Navarro Batalla, secretario de la sección sindical del Taxi en Barcelona, que pese a su reciente reconstitución, lleva ya una ingente actividad a las espaldas.
Redacción | Periódico CNT
Pregunta: ¿Cuándo y por qué decidís integraros en CNT? ¿Podríais explicar brevemente la trayectoria de la sección del taxi en estos últimos tiempos?
Respuesta: Todo empieza hace unos años, cuando decidí afiliarme a CNT ya que no me identificaba con las organizaciones y sindicatos del taxi existentes, además ya había estado afiliado en 1996. Luego conocí a otros compañeros del taxi, en especial a Mariano Gutiérrez, Aleu y Alberto que estaban en “Taxis anarquía”, asociación cultural que en ese momento estaba reivindicando la parada de la estación de Sants, y me uní a ellos. Había mucha afinidad entre nosotros, ya que en el pasado Mariano, Alberto y Aleu también había militado en CNT. Se puede decir que “Taxis anarquía” fue la base para formar posteriormente la sección del taxi en CNT ya que, aunque por circunstancias, la asociación decide su disolución, luego vendrían a afiliarse Christian, los hermanos Luis y Ricardo, dos veteranos que llevan una larga trayectoria de lucha en el taxi de Barcelona, Aleu y Segundo otro compañero veterano… Así que, con ese grupo, presentamos en la asamblea del sindicato el proyecto de reconstituir la sección, algo que se aceptó por unanimidad. Y digo reconstitución porque ya en los 70 y 80 existieron secciones sindicales del taxi, aunque por diversos avatares se disolvieron posteriormente.
Una vez constituida la sección sindical, empezamos a trabajar de manera intensa en el sector: reparto de información, participación en asambleas, actividades conjuntas con otros grupos del taxi como la concentración en la plaza Sant Jaume, recogida de firmas y la huelga del taxi del día 31 de octubre para defender la consulta que se hizo a los trabajadores del sector.
A esa primera actividad seguirían las afiliaciones: Kiko, Raffa, Francisco, Emili… Actualmente en la sección hay taxistas autónomos y también asalariados, y se puede decir que estamos dando guerra en un sector muy dividido, muy individualista, y donde muy poca gente se mueve.
P: ¿Ha habido recientemente algún conflicto o actividad que destaque entre las demás?
R: Llevamos un año defendiendo la consulta que se hizo a los taxistas con el fin de tomar medidas contra la crisis. En ella, los taxistas eligieron dos tipos de turnos que la administración no ha respetado. Desde entonces hemos realizado asambleas, recogida de firmas, una concentración en Sant Jaume, entrega de cartas al alcalde, Xavier Trias, y una huelga del taxi del día 31 de octubre conjuntamente con otros grupos del taxi.
El día 2 de enero la administración decide poner unos turnos inefectivos y muy complicados, que no eran los que eligieron los taxistas, agravando la situación del sector en Barcelona, lo que lleva a que, poco a poco, la situación se vaya complicando más y más y los taxistas de manera espontánea deciden hacer huelga indefinida haciendo piquetes en el aeropuerto del Prat, exigiendo la retirada de dichos turnos. Así se estuvo durante 3 días hasta que la administración cedió y optó por retirarlos.
P: ¿Cuáles diríais que son los aspectos más positivos y más negativos de la sección del Taxi?
R: Los aspectos más positivos, la unión y afinidad que hay entre nosotros. En cuanto al más negativo, los ataques por parte del sindicato mayoritario del taxi, el STAC (Sindicato de Taxistas Autónomos de Catalunya) en forma de mentiras y calumnias para desprestigiarnos y dejarnos en evidencia ante los demás taxistas; el último vino por parte de su secretario general, que declaró en la radio que habíamos firmado el nuevo convenio del taxi para asalariados junto a UGT y CCOO.
P: ¿Cómo definiríais el ambiente de conflictividad sindical en vuestro sector, más allá de la CNT? ¿Tenéis algún tipo de relación con otras fuerzas sindicales o gremiales? ¿y fuera de Barcelona?
R: El grado de conflictividad es muy alto ya que esto se asemeja a una jungla: nadie respeta el convenio para asalariados, son obligados a trabajar en turnos de 12 horas, (con contratos de 4 y 8 horas) bajo amenaza de despido, a algunos les hacen pagar la gasolina, otros se tienen que pagar la Seguridad Social, otros ponen dinero de su bolsillo para tener contento al jefe ya que no consiguen una recaudación aceptable porque no hay trabajo y todos tienen miedo a denunciar estas injusticias.
Sí tenemos muy buenas relaciones con grupos con los que trabajamos conjuntamente como Taxi Companys, TAB (Taxistas Autónomos de Barcelona) y Nova Generació del Taxi, que es una asociación de taxistas pakistaníes y marroquíes. Fuera de Barcelona no tenemos ninguna relación.
P: ¿Podríais hacer una pequeña introducción a la composición sociológica del trabajador del Taxi en Barcelona? En Madrid existe por ejemplo la idea -no del todo fundada- de que son profundamente conservadores cuando no directamente fachas ¿es compartida esa idea en Barcelona?
R: El estereotipo típico del taxista que tiene mucha gente en mente es el del que escucha la COPE en la radio, serio y conservador de derechas, muy pesetero -por eso a los taxistas nos llaman “pesetas”, pero afortunadamente las cosas van cambiando, surgen nuevas generaciones de taxistas más abiertos e inquietos, aparecen nuevos taxistas luchadores y solidarios que no solo funcionan a base de dinero.
P: ¿Cómo veis el panorama local en cuanto a agitación social –más allá de la lucha en el sector-?
R: El panorama social lo vemos muy caliente, con mucha agitación. Ya llevamos dos huelgas generales, la crisis sigue y sigue, los casos de corrupción y de estafas están a la orden del día, los recortes en sanidad, educación, el paro… La situación es muy complicada, pero también hay cosas positivas: la gente esta despertando de esta mentira, se está espabilando y organizando como por ejemplo el movimiento 15-M de los indignados, que ha sido casi una revolución; surgen nuevos proyectos, nuevas ideas en forma de asociaciones, de cooperativas, de recuperación y autogestión de fabricas abandonadas, nuevas formas de organizarse ante este viejo sistema podrido y lleno de mentiras.
Por nuestra parte, animamos a todos los parados, a los sin techo, a los que son explotados en sus trabajos a organizarse y luchar.
Finalmente queremos dar las gracias a todos los militantes de CNT Barcelona por todo su apoyo y ayuda, gracias a ellos la sección sindical del taxi de la CNT es una realidad.
