El recorte en cultura que han realizado las instituciones públicas con la excusa de la crisis es del estilo tragedia griega de Esquilo. Aquí muere hasta el apuntador:
Casi no se programa en los teatros locales o regionales, han bajado las ayudas a las producciones, se han reducido a la mínima expresión las dotaciones presupuestarias de festivales y ciclos culturales. En muchos lugares públicos se contrata por un caché tan pequeño que las mismas instituciones saben que es imposible que las compañías cumplan la legalidad con sus trabajadores o lo que es peor, se contrata “a taquilla”, lo que puede llevar a la ruina directa de cualquier espectáculo…
Todas estas medidas están empobreciendo y precarizando a todos los trabajadores y las trabajadoras del sector de la cultura. Pero “se venden” con una excusa perfecta que sirve para todo: el as en la manga de la crisis.
Sin embargo, existe una medida que no tiene tras qué esconderse: la subida del IVA cultural al 21%. El gobierno del Partido Popular subió en 2012 el IVA cultural del 8% en el que estaba, hasta el 21%. En un primer momento sí que echó mano de la excusa de la crisis y de la necesidad de “recaudar”. Desde las distintas voces del sector tratamos de explicar al gobierno que la CULTURA es un sector muy frágil que o no produce o produce muy poco margen de beneficio económico; que una medida así iba a provocar un descenso en la asistencia del público y por tanto, un descenso global en la recaudación. Vamos, que el estado iba a recaudar menos de lo que estaba ingresando entonces. NADA.
Un año y medio después de esta puntilla, el sector está devastado y, efectivamente, el estado ha ingresado mucho menos de lo que tendría que haber ingresado.
Lo sabíamos y lo sabían.
Pero también sabíamos que era una medida política con la idea de castigar a todo un sector que siempre le ha resultado molesto. Porque el poder entiende que los payasos, los bufones y los comicuchos sólo debemos hacer reír y nosotros no les hacemos ni maldita la gracia.
Y a nosotras, técnicos, maquilladores, cámaras, actrices, músicos, directoras… las trabajadoras del mundo del espectáculo, no nos gusta callarnos ni debajo del agua.
Por fin, han bajado el IVA del arte al 10%. Nos alegramos por los compañeros… pero ¿Qué pasa con el resto del sector? ¿Qué hay de los perroflautas que conseguimos que el público no sólo se ría sino que además, piense?
Por la bajada del IVA cultural del 21% al 4%
Es cultura
No es negocio
—
Sindicato de Artes Gráficas, Comunicación y Espectáculos de Madrid – CNT
Tfno.: 91 704 60 54 / 628 367 594
Permanencias de martes a jueves a partir de las 19:00 horas.
Plaza de Tirso de Molina, 5, 6º derecha. Madrid.