“El 15-M forzó al poder a tomar conciencia de que no se puede seguir así”
Basilio Martín Patino acaba de estrenar Libre te quiero, el primer trabajo que el lleva a cabo, después de mucho tiempo, sin guion previo: “el guion estaba en Sol”, y que para el director supuso un rodaje muy feliz. Desde la redacción del cnt aprovechamos la ocasión para entrevistarle en su casa y compartir un agradable rato con él y su compañera, Pilar.
P. Nacarino y M. A. Fernández
¿Cómo se te ocurre la idea de hacer Libre te quiero?
Respuesta: Es una canción preciosa de Agustín García Calvo que canta muy bien Amancio Prada: “Libre te quiero/como arroyo que brinca/de peña en peña./ Pero no mía.” Creo que encaja perfectamente con las imágenes.
Sí, pero ¿la idea de hacer la película cómo surge?
Acabábamos de llegar de Salamanca [el quince de mayo de 2011], tuvimos una cena, en ella se hablaba de que Madrid estaba muy revuelto, decidimos acercarnos a la Puerta del Sol, que está aquí al lado y nos encontramos con todo el ambiente, fue maravilloso. Inmediatamente decidimos que aquello había que rodarlo y a las nueve de la mañana estábamos otra vez allí, con las cámaras.
El rodaje fue un proceso lento. Cuéntanos cosas de él, como os organizabais ¿Tuvisteis algún problema a la hora de rodar? Cuéntanos alguna anécdota. ¿Hubo improvisación?
¡No, no hubo improvisación, estaba muy bien organizado, cada uno sabía lo que tenía que hacer, recibíamos una información e íbamos a rodarlo. Realmente estábamos todos muy ilusionados. Fue un rodaje feliz. Yo creo que el más feliz que he realizado y en el que menos problemas he tenido.
En la película aparece la policía agrediendo a los manifestantes. ¿Tuvisteis algún problema para grabar esas imágenes?
No, ningún problema, yo creo que incluso posaban. Y rodamos imágenes muy duras.
El Ministerio del Interior quiere sacar una ley que prohiba rodar a los policías en las manifestaciones. ¿Qué opinas tú de esto? ¿Crees que saldrá adelante? ¿Te meterán en la cárcel?
Bueno, si me quieren venir a buscar, aquí estoy, he estado muchas veces en la cárcel. No tenía noticia de esa ley, no creo que la saquen, España ha evolucionado, ya no es como en otros tiempos. Antes a un director general le tenías miedo, les conocíamos a todos, eran personajes terribles, oscuros, eso ya no ocurre.
En la película muestras claramente el carácter pacífico del movimiento. Muestras las asambleas participativas, sin líderes ni rostros conocidos, Los aspectos lúdicos, gente haciendo teatro de calle, conciertos de la Solfónica, la biblioteca al aire libre, jóvenes bañándose en las fuentes públicas, etc… ¿Crees que el 15-M es un movimiento libertario?
Bueno, tampoco había mucho conocido por allí. Sí, creo que sí es un movimiento libertario, la gente espontáneamente en la calle. Lo que no sé si seguirá siendo lo mismo ahora, si no ha cambiado. No se puede estar continuamente en estado de euforia, es agotador, la gente se cansa. Y no sé hasta que punto es ahora como al principio. No puede durar siempre.
Personalmente ¿Cómo has vivido tú el proceso: las manifestaciones masivas, las marchas provenientes de toda España, la globalización del movimiento exportándose a París, Londres, Wall Street?
Lo he vivido con mucha ilusión. He sido feliz. Lo he disfrutado mucho, sobre todo cuando empezó a extenderse por todo el mundo, algo que había nacido en España, fue maravilloso.
Hacia el final de la película introduces unas imágenes estáticas, fotografías familiares, en las que aparece un televisor mostrando, en movimiento, imágenes de la calle y el 15-M. Supongo que en referencia a la gente que decide quedarse en casa. Es muy original y gracioso ¿cómo se te ocurrió este recurso?
Era más bien en referencia a la gente que, por el motivo que fuera, no pudo salir a la calle aunque hubiera querido hacerlo. Fotografiamos varias familias y grupos, posaban alegremente y se lo pasaban bien, fue muy divertido.
Hablemos del momento actual. El movimiento parece seguir vivo y ahora se añaden a la protesta la “marea blanca”, la “ marea verde”, las huelgas motivadas por los numerosos ERES de grandes empresas, etc… ¿Crees que el movimiento tiene futuro después de casi dos años, o se irá desgastando?
Como he dicho antes mantener la euforia cansa mucho, pero los jóvenes pueden mantener la alegría y la ilusión, y, con la colaboración de todos, el 15-M puede seguir vivo, aunque sea difícil.
Entre los logros del 15-M ha estado, por ejemplo, la paralización de numerosos desahucios, consiguiendo que el tema salte a la arena política, jurídica y financiera. ¿Qué otras cosas crees tú que se han conseguido con el movimiento?
Lo de los desahucios no es poco, ni mucho menos. Impedirlos es un acto de justicia social. La gente no se puede quedar sin casa donde vivir y los poderes de los que hablas se están viendo obligados a cambiar ciertas cosas.
¿Crees que se podrá lograr una transformación social profunda a partir del 15-M o el poder está demasiado institucionalizado y es inamovible?
Aquello caló. Ha forzado al poder a tomar conciencia de que no se puede continuar así. Y está produciendo cambios. Quizá no todos los que desearíamos, pero se han dado cuenta de que no pueden hacerlo todo a su antojo.
También llegó a internacionalizarse.
Sí, fue maravilloso: Nueva York, Londres, París, Berlín… Y lo más bonito es que era un movimiento nacido en España, entre nosotros, creado por nosotros.
Los derechos de la película han sido adquiridos por TVE para su exhibición en la pequeña pantalla. ¿Crees que el canal público, ahora en manos del PP, la emitirá o será archivada en un cajón como sucedió durante décadas con Queridísimos verdugos?
Tengo buenos amigos en TVE, hay gente muy profesional y consciente trabajando allí. Independientemente de los políticos de turno. Creo que los tiempos han cambiado para bien, las cosas han mejorado. Lo normal es que la emitan.
¿Siempre te produces tus películas?
Exceptuando Nueve cartas a Berta, que la produjo un amigo mío. Creo que es la manera de sentirte libre a la hora de hacer películas, nadie interfiere desde arriba por cuestiones económicas o de censura. Es arriesgado, este oficio lo es, pero merece la pena.
¿Tienes algún nuevo proyecto en mente?
Sí, siempre hay proyectos. Pero prefiero no hablar de ellos, ya sabéis lo fastidiado que es este oficio, luego igual no salen.
¿Dinos algunas razones para seguir indignados?
Bueno, el gobierno, los bancos y la policía siguen ahí, a lo suyo. Creo que es suficiente.