El tiempo del tiempo

COLUMNISTAS | ANA SIGÜENZA

Hace muuuccho tiempo, si no estabas atenta a la tele, se te
podía pasar la información meteorológica que duraba un suspiro. Bastante menos
que los deportes: 5%  del informativo
principal.

Últimamente tenemos la sensación de que la programación
televisiva está sumergida en un permanente gráfico, en el que las isobaras de
la “1” dan paso al anticiclón de las Azores en Antena3. O que las elevadas
temperaturas del Valle del Guadalquivir de la autonómica enlazan con las del
Valle del Ebro de la Cuatro. El polvo sahariano entrando por el Sur peninsular de
la “5” continúa genialmente con ese frente del Noroeste que dará inestabilidad
a la Costa Gallega, sin variar el interior de Orense como nos explica “24
horas”.

Desde Madrid es una pena no disfrutar del zapping que nos
llevaría del granizo de Logroño en ETB a las nubes de evolución y riesgo de
tormentas en el interior de Cataluña que da TV3.

Y qué decir del estudio comparado de temperatura máxima,
mínima, media del último siglo, la de ayer, hoy, mañana, pasado y la del fin de
semana en Puenterrabanal del Páramo. Es como para quedarse en estado “Alfa”.

Y luego, la divulgación: puedes enterarte hasta de que en
otoño se caen las hojas y que Saturno tiene anillos. Este lunes, sin ir más
lejos, “La 1” ha dedicado 8:39 minutos a “Intervalos
nubosos en el NE de Cataluña”
, 7:32 a “Tormentas
localmente fuertes en el SE peninsular”
y 1:55 a “Nubes en el N y SE”.

El tiempo dedicado a “El Tiempo” se ha triplicado. ¿Puede
haber algo más político?

Igual conseguimos hueco en la tele para lo social si pillamos
el estilo meteorológico:

 “Breves intervalos de
derechos, seguidos de fuertes rachas de abuso. Alerta naranja ante descenso
brusco de condiciones de vida. Riesgo máximo de radiación ultracapitalista.
Eviten la exposición de mayores, criaturas, personas dependientes, enfermos,
trabajadores, mujeres y estudiantes. Procuren salir de sus casas hasta meter
entre isobaras a todos los banqueros que quieren evaporar nuestras pensiones.
Esperanzas localmente moderadas sin claudicación en el resto. Es un consejo de
la Confederación Nacional del Trabajo: Más de 100 años haciendo predicciones” 

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