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La devaluación salarial impuesta por las políticas gubernamentales y con el acuerdo del sindicalismo político, reduciendo los salarios, las prestaciones sociales y los derechos laborales, como forma de ser más competitivos y aumentar las exportaciones no ha generado ni un solo puesto de trabajo.
La Organización para la Cooperación y el
Desarrollo Económico (OCDE), que agrupa al capitalismo internacional, en su
Informe de noviembre de 2013, calcula una caída del Producto Interior Bruto
(PIB) de España en 2013 del 1,3% y unas previsiones de crecimiento en 2014 del
0,5%, advirtiendo que no sirve para generar ni un solo puesto de trabajo,
manteniéndose el desempleo en España en torno al 26%, más de 6 millones de
parados, sobre todo por el descenso del
número de ocupados, aquellos trabajadores desesperados por el largo desempleo
que ya no buscan trabajo, pero que las estadísticas gubernamentales no cuentas
como parados, aunque lo estén.
La situación en Europa es similar con
una reducción del 0,4% en 2013 y un crecimiento del 1% en 2014, y en el Mundo
ocurre lo mismo con un avance del 2,7% en 2013 y del 3,6% en 2014, pero que no
va a crear ni un solo puesto de trabajo, sino todo lo contrario, por estar
embarcados los gobiernos del mundo en una avalancha de despidos como mecanismo
de preservar el capitalismo, es decir sus privilegios, poder y riqueza.
Las políticas gubernamentales de ayudas
y subvenciones a la banca, justificadas para llevar el crédito y los préstamos
a las empresas y ciudadanos, que aumente el consumo y la demanda interna,
provocando un crecimiento de la economía que genere empleo, se ha convertido en
una mentira más y en una gran injusticia en el reparto de la riqueza, aumentado
su injusta distribución en favor de los ricos y bancos y en contra de los
trabajadores y la sociedad. Todo el dinero recibido por la banca a tipo cero es
utilizado en financiar la deuda de los estados a tipos del 6%, ni un solo
préstamo para los ciudadanos.
El saneamiento de la banca se ha
producido con fondos públicos y estatales en cantidades ingentes de billones de
euros con subvenciones, avales y ayudas directas, y, por medio del privilegio y
monopolio concedido por la Unión Europea a la banca de financiar a los estados
su deuda fiscal, sin que los estados puedan acudir directamente a la
financiación del Banco Central Europeo (BCE), organismo dependiente de la Unión
Europea, dotado de fondos públicos y estatales. Es más, la financiación
ilimitada concedida por el BCE, billones de euros sin límite a tipo de interés
casi cero o gratis, es prestado a los Estados al 4%, 5% y 6% para financiar la
deuda estatal y las ayudas directas concedidas a los bancos por estos mismos
Estados a tipo cero. El robo tiene este nombre, la injusticia también.
La mentira de las ayudas estatales a la
banca para que llegue el crédito a las familias, ciudadanos y las empresas está
documentada con estas políticas de robo de recursos públicos, en la identidad
de intereses de una clase política y banquera que se intercambian los cargos
ordenadamente, en un ejercicio de alternancia política basada en la corrupción
y control monopolista del mercado, con acuerdos de manipulación de precios en
todas las actividades, siendo una de las más odiosa la fijación de los tipos de
interés de las hipotecas bancarias sobre las viviendas y la consecuencia del
drama de los desahucios.
La devaluación salarial impuesta por las
políticas gubernamentales y con el acuerdo del sindicalismo político (Acuerdo
salarial Gobierno PP, CCOO y UGT de enero de 2012 de reducción salarial en
España), reduciendo los salarios, las prestaciones sociales y los derechos
laborales, como forma de ser más competitivos y aumentar las exportaciones no
ha generado ni un solo puesto de trabajo. Desde esa fecha a la actualidad el
paro forzoso ha aumentado en más de un millón y medio de personas, y los
salarios se han reducido constantemente. Incluso con Expedientes de Regulación
de Empleo (limpieza y basuras de Madrid noviembre 2013) de reducciones
salariales del 40% para sueldos mensuales de mil euros.
Poder y mentira unidos en unas elites
gobernantes económicos y políticas corruptas que son la definición de lo que se
llama “crisis”, porque ellos son la “crisis”,
solamente con su desaparición y la de sus estructuras de poder y explotación
capitalistas, incluidos todos sus organismos internacionales capitalistas, FMI,
OCDE, BM, BCE, Unión Europea…
completamente parasitarios, se podrá avanzar en un auténtico progreso
económico y social de trabajo y bienestar para todos. Los trabajadores tenemos
la palabra y la acción.
