El pasado 15 de diciembre tuvo lugar en la sede la CNT-AIT de Málaga una charla en la que se expuso nuestra propuesta de acción anarcosindicalista en las empresas: la sección sindical.
El resto de organizaciones sindicales (que en su mayoría cobran subvenciones y tienen liberadxs) se reiteran en la participación en elecciones sindicales y comités de empresa. Bien se ha demostrado con el paso de los años que la integración de los sindicatos del Estado Español en este modelo ha supuesto que se hayan burocratizado y corrompido, que practiquen el inmovilismo y la pasividad, llevando a la separación y el desencanto de la clase trabajadora con respecto al sindicalismo.
Pues bien, lo que esta charla ha intentado exponer es que la CNT tiene una estrategia sindical que evita la aparición de burocracias, en la que los trabajadorxs son protagonistas, gestionando el sindicato a través de asambleas, sin que nadie cobre nada por llevar a cabo el activismo sindical. Un sindicato como el nuestro no se vende a una empresa o al Estado, porque rechaza las subvenciones y porque todas las decisiones deben ser tomadas en asamblea por el conjunto de afiliadxs. Por tanto, se trata de una forma organizativa que siempre servirá al interés del/la trabajador/a y nunca al interés del empresarix.
Las secciones sindicales de la CNT – a diferencia de las de otros sindicatos – están integradas por el conjunto de afiliadxs de nuestro sindicato en una empresa, realizando su actividad sindical al margen del escenario orquestado por la dirección de la empresa y promovido por el maquinaria estatal: la elecciones sindicales. Si los comités de empresa se destacan por su rigidez, caducidad, delegacionismo y por estar elegidos por la empresa – o con su beneplácito -, las secciones sindicales lo hacen por su flexibilidad, autonomía de su la empresa, supeditación a la tutela del sindicato y por ser referentes de lucha constante.
La compañera responsable de la charla, secretaria de Acción Sindical de la CNT-AIT de Barcelona – sindicato que hoy día se destaca por un amplio desarrollo de nuestra apuesta sindical – señalaba que las secciones de CNT sobresalen por la formación de sus integrantes y por la actividad continuada que realizan en los centro de trabajo. Si los comités limitan su acción sindical al momento de las elecciones, las secciones de CNT llevan a cabo una actividad constante, que anula las respuestas represivas de la empresa. Hay que mencionar que somos el único sindicato del Estado que está consiguiendo sentencias de nulidad en casos de despido por represión sindical. Por supuesto, para ello, nuestras secciones deben ser firmes y perseverantes, sin momentos de relajación, pues es entonces cuando son vulnerables. Esto ha creado una dinámica interna que las convierte en ejemplos de lucha, defensa y conquista de derechos laborales.
Así, el grupo de trabajo que realiza la actividad sindical se hace lo más amplio posible, intentando que se dinamice y distribuyan las tareas dentro de la sección, haciendo participe a todxs lxs afiliadxs, e incluso, a la plantilla. De esta forma, además del delegado sindical, se funciona mediante grupos de trabajos – integradas por trabajadorxs de diferentes realidades, categorías,… – que trabajan en la generación de documentación propia de la acción sindical: económica, jurídica, seguridad laboral, propaganda,… Por supuesto, para esto es fundamental la formación incesante de lxs integrantes la sección.
Además, se intenta conseguir la unidad de clase, rompiendo las diferencias entre lxs trabajadorxs que conforman la plantilla, potenciando las asambleas de trabajadorxs, la participación e implicación de la plantilla, lo cuál ha convertido a las secciones en referentes de lucha y en motor del sindicato.
La charla causó muy buena impresión a los asistentes, los cuales indicaban el optimismo que les había producido, ya que demuestra que el anarcosindicalismo no es una herramienta del siglo pasado, sino que está vivo y que debe ser un referente para la clase trabajadora por su dinamismo, flexibilidad, eficacia y potencial transformador.