Comunicado ante el preacuerdo alcanzado entre CCOO, UGT y la UPM para el nuevo convenio de la siderometalurgia de Barcelona
Para CNT el preacuerdo alcanzado entre CCOO, UGT y la UPM para el nuevo convenio de la siderometalurgia de Barcelona significa una oportunidad perdida para el sector.
El preacuerdo es, en líneas generales, la aplicación del Acuerdo Estatal de Negociación Colectiva (AENC) acordado entre los mismos sindicatos y la CEOE, limitando la subida salarial entre el 2% y el 3% a cambio de una paz social necesaria para mantener el status quo de las élites.
Ni redistribución de la riqueza, ni reducción del tiempo de trabajo, ni un verdadero plan de choque de igualdad, ni mejoras tangibles en la lucha contra la siniestralidad que la última década de crisis ha hecho crecer de forma alarmante.
El acuerdo alcanza un incremento del 2,6% de los salarios por el 2018 y del 2,5% para el 2019. A pesar del anuncio de una cláusula de revisión técnica, en caso de que el incremento del IPC supere estas cifras no habrá retroactividad. La cláusula sólo tendrá efecto para el 2020, año que habrá que negociar el siguiente convenio. Es decir que no tendrá efecto real en las rentas del trabajo, permitiendo consolidar nuevamente la pérdida de poder adquisitivo.
En materia de jornada laboral se mantienen las 1.750 horas anuales para los años de vigencia de convenio, incluso para el 2020. Se crea la figura de un permiso individual de 8h a partir de 2020, que requerirá de un acuerdo entre trabajador y empresa en cómo disfrutarlo, dejando en posición de debilidad a la persona trabajadora.
En cuanto a la estabilidad en el trabajo el único avance ha sido la incorporación en el derecho a la subrogación de nuevas actividades de instalaciones y mantenimiento de sistemas e infraestructuras de transporte ferroviario, empresas del complejo aeroportuario y en general aquellas contratos de administraciones y organismos públicos. Lamentamos que no se elimine ni se rebaje el suelo de 200.000 habitantes para la subrogación en mantenimiento de alumbrado público y semáforos, dejando fuera de esta histórica reivindicación en la mayoría de poblaciones de la provincia. En cualquier caso tendremos que esperar al redactado definitivo.
El acuerdo se limita a hacer una recomendación a las empresas para restringir el uso de las horas extraordinarias. Lo que en la práctica sigue dando carta blanca a su uso en lugar de incrementar la contratación.
El tratamiento en los planes de igualdad planteado no solucionará ni la brecha salarial, ni las categorías inferiores a las que por norma se somete a la mujer.
Desde CNT hemos querido dar nuestra opinión sobre los principales aspectos del convenio. Consideramos que este acuerdo pone de manifiesto la poca capacidad de CCOO y UGT para movilizar al sector en un momento de grandes expectativas. La recuperación económica de la que se habla constantemente en la opinión pública no se traducirá en una redistribución de la riqueza.
Desde CNT presentamos nuestra propuesta para un convenio digno, y consideramos que tras este preacuerdo debemos entrar en otra fase de mejora en nuestra propia organización, incrementando la implantación de nuestras secciones sindicales en centros de trabajo, empresas y grupos de empresa impulsando acuerdos a estos niveles basados en nuestro modelo de negociación colectiva y que puedan introducir estas mejoras que hace semanas proponíamos al sector.
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Coordinadora del Metall de la província de Barcelona de CNT