La
participación y lucha contra los despidos de la sección sindical dentro del proceso de modificación de las
condiciones de trabajo en Comsa Emte, empresa del sector de la construcción.
Redacción | Periódico CNT
Tras la fusión en 2009 de las
constructoras Comsa y Emte en el grupo Comsa Emte, formada por las familias
Miarnau y Sumarroca, se han sucedido toda una serie de recortes en la plantilla
pasando en pocos años de 2.200 a 966 empleados. Actualmente la plantilla se
enfrenta a un proceso de modificación sustancial de las condiciones de trabajo
(MSCT) en el que se incluye un nuevo ERE.
Es en estas circunstancias en las
que surge la sección sindical en la empresa. Óscar Pescador y Juan Tirado,
compañeros de obra que compartían las mismas inquietudes e ideas, decidieron
afiliarse a CNT en El Prat de Llobregat y pronto se constituyó la sección. Estos
primeros pasos fueron fundamentales para Óscar y Juan al contar con el apoyo
del sindicato y la Regional de Cataluña y Baleares, participando en la realización
de un curso de acción sindical, así como el apoyo de otros sindicatos como el
de Barcelona a través de su secretaria de acción sindical.
Desconcierto en la empresa
Tras firmar el acta de
constitución de la sección, su inscripción en el departamento de Trabajo y su
posterior comunicación a la empresa, llegan las primeras complicaciones: el no
reconocimiento de la sección.
Tras una primera reunión con el
jefe de recursos humanos para tratar cuestiones como la tabla reivindicativa,
éste trasladó el desconcierto de la empresa y su confusión al compararlo con el
comité de empresa. Pasadas varias semanas, la empresa informa de que «según el vigente marco legal no
se cumplen los requisitos jurídicos necesarios para la representatividad como
sección sindical que ustedes manifiestan», es decir, que ni reconocen a la sección ni atienden sus
reivindicaciones.
Tras una segunda reunión más
tensa que la anterior en la que la propia empresa reconoce «no tener ni idea» sobre esta cuestión, la sección
decide formular una denuncia ante Inspección de Trabajo al adeudar de forma
reiterada al delegado el plus de nocturnidad.
La lucha de la plantilla
Anteriormente a esta última
reunión, el comité de empresa convocó a los trabajadores y trabajadoras a una
reunión para informar de las intenciones de la empresa de hacer una
modificación sustancial de las condiciones de trabajo.
La sección informó de que la
empresa pretendía aplicar un ERE –aspecto este que fue sonsacado en la primera
reunión-, lo cual provocó un malestar general en la asamblea, votándose la
propuesta de no negociar nada con la empresa. Aquí la sección sindical se hizo
fuerte y forzó al comité a que estuvieran presentes en el proceso de consultas
de la MSCT. Esta situación provocó la oposición de la empresa, intentando
ningunear a la sección y ocultándola información.
En la primera reunión del periodo
de consultas, acudieron por parte de CNT el delegado de la sección, el
secretario general de la Regional y un miembro del Gabinete Técnico Confederal
(GTC), herramienta jurídica de reciente creación en la central
anarcosindicalista. La postura de la sección sindical fue la de no aceptar la
rebaja salarial propuesta por la empresa y no entrar a negociar los mínimos,
pues tras el informe del GTC se decidió contrarrestar las causas esgrimidas y
así poder ganar una demanda colectiva ante la empresa.
Es entonces cuando la CNT
promueve las movilizaciones de menos a más con la intención de hacer un paro
general desde el conflicto colectivo. De esta forma se realizaron sendas
acciones, una durante la Feria del BCN Rail y otra a las puertas de la central
de la empresa, esta última con participación también del comité de empresa.
Victorias y derrotas
Tras finalizar el proceso de MSCT
a finales de diciembre de 2013 «con
un rotundo y unánime “sin acuerdo”»,
la plantilla creyó haber ganado el conflicto. Pero nada más lejos de la
realidad. A la vuelta de las vacaciones navideñas, la empresa informó al comité
de que aplicaría unilateralmente los recortes rechazados en la negociación como
fue la bajada del 7% de la masa salarial total.
Ante esta situación el comité
solicitó la mediación del SIMA en Madrid al ser un conflicto de ámbito estatal.
Tras informar a la plantilla de esta situación, la plantilla vota mayoritariamente
acudir al SIMA a negociar a pesar de la oposición de la sección sindical de no
negociar ninguna rebaja de sueldo ni de las condiciones laborales. Aun así tuvo
que aceptar la decisión mayoritaria, pero con la intención de defender en todo
momento los puestos de trabajo. En este proceso de negociación, Óscar y Juan
destacan el apoyo recibido por parte del Sindicato de la Construcción de la
Federación Local de Madrid.
Finalmente, con una apuesta en
firme por la empleabilidad, apoyada por el Sindicato Ferroviario y
posteriormente por todos los representantes de la comisión, llegando a
obtenerse ocho puntos de acuerdo, siendo muy destacables el compromiso de
comisiones de seguimiento trimestrales con la empresa con el objetivo de tratar
la política de subcontratación, contratación y sueldos. También se compromete
la empresa a no iniciar ningún despido colectivo por causas productivas durante
el año 2014.
A pesar de esta importante
victoria, no se consiguió que la empresa se comprometiera a no aplicar ningún
ERE ni despido objetivo pero no fue posible, en parte por la poca capacidad de
movilización de la plantilla. Para Óscar y Juan, no cabe la menor duda de que
si la actitud de la plantilla fuera más combativa, se hubiese conseguido un
acuerdo mucho más positivo.
Finalmente el preacuerdo fue
aceptado y ratificado mayoritariamente, lo cual a juicio de la sección sindical
es un error. «No se deberían
llegar a acuerdos que benefician principalmente a la empresa y dejar sin atar
la estabilidad del empleo. Se debería haber ido a conflicto colectivo y seguir
luchando por la vía de la acción directa, sentencian los compañeros.
Mientras tanto, la sección continúa trabajando y manteniendo
una actividad sindical activa, preparada y dispuesta a plantar cara a los retos
actuales y los que estén por llegar.