La noche del pasado sábado, en el barrio de Vallekas, 2 compañeros de CNT AIT Madrid y uno del Colectivo 1984 fueron detenidos violentamente por la policía municipal de paisano cuando se les pidió que se identificaran debido a su violento proceder.
A continuación uno de los policías procedió a identificarse golpeando con la placa al compañero que lo pidió, y agrediendo además a otro de los compañeros. Fueron acusados de apedrear los cristales de una cadena de hamburgueserías que ya estaba dañada, a causa de los disturbios de la semana pasada.
Este caso no es para nada aislado y entendemos que responde a la necesidad del estado de limitar los derechos a los ciudadanos en estos tiempos de crisis, de acrecentar el miedo entre la población, haciéndole creer que se incrementan la delincuencia y la criminalidad por parte de los elementos más indefensos de la clase trabajadora: los jóvenes y los inmigrantes, así como entre la gente organizada en grupos, colectivos o en otras organizaciones que pretenden hacer ver la realidad del capitalismo y cuya finalidad es superarlo, al verse más perseguida en estos tiempos que corren.
No nos extraña el trato que los mercenarios a sueldo del estado dieron a nuestros compañeros tanto física como psicológicamente, así como al resto de detenidos que se encontraban en los calabozos, en su totalidad gente de muy escasos recursos económicos e inmigrantes, cosa que responde claramente a los controles racistas organizados por el gobierno “socialista”; siendo esta la realidad social que se vive en los barrios obreros, enmascarada bajo la aparente comodidad y bienestar que nos hacen creer que vivimos.
La represión tiene un objetivo: el miedo. No han conseguido su objetivo. Nos reafirmamos en la lucha.
