El pasado día 23 de diciembre representantes de CNT y representantes de la empresa Ejidoluz llegaban a un acuerdo en el CMAC por el que se pone fin al conflicto laboral que la central anarcosindicalista ha mantenido por el despido de una de nuestras afiliadas.
El acta de conciliación recoge la improcedencia del despido y por lo tanto los salarios de tramitación devengados desde la fecha del despido el día 12 de noviembre, hasta el día de la conciliación el pasado día 23 de diciembre; la indemnización proporcional al tiempo trabajado y la liquidación del plus de transporte que se había devengado. Este acuerdo satisface a la trabajadora afectada, que de alguna manera, la resarce ante el menoscabo de su dignidad durante los once días que ha trabajado en esta empresa.
Piquetes informativos difunde entre la plantilla panfletos sobre los distintos incumplimientos del convenio colectivo
Recordamos que Ejidoluz es una empresa de una plantilla de 120 trabajadoresas que desarrolla su actividad productiva en el sector del manipulado de frutas y hortalizas. El inicio del conflicto se originó por la extinción durante el periodo de prueba del contrato de trabajo de una de nuestras compañeras. Durante este periodo las empresas gozan de total discrecionalidad y amparo jurídico para despedir debido a que no tienen que alegar la causalidad de la extinción. Esta circunstancia, unida a un excesivo periodo de prueba (2 meses para trabajadoresas no cualificados, que el convenio sectorial no limita), hace que los trabajadoresas, especialmente el personal eventual, que son contratados bajo la modalidad de contrato de fin de obra o servicio sean sometidos a todo tipo de presiones y coacciones para adaptarse a un régimen de trabajo más propio de países subdesarrollados que de un país civilizado. En el caso de nuestra compañera esta, se negó a someterse a estas condiciones, concretamente a realizar horas extraordinarias después de una jornada ordinaria de nueve horas según convenio. Esto provoca el despido a los once días de trabajo con el pretexto de no haber superado el periodo de prueba. No obstante, y a pesar de que jurídicamente teníamos todo en contra, desde la CNT consideramos que este despido estaba motivado por la negativa precisamente, de realizar horas extras y por lo tanto, se hacía vulnerando derechos fundamentales. Consecuentemente presentamos demanda de conciliación en el CMAC pidiendo la nulidad del despido al mismo tiempo que fijábamos un calendario de movilizaciones.
El 16 de diciembre el primer piquete informativo compuesto por compañerosas de la CNT de Adra y Almería se concentraba en la sede de la empresa coincidiendo con la entrada del turno de tarde. Allí informamos a la plantilla sobre las infracciones que Ejidoluz, con la complicidad del Comité de Empresa, está realizando en distintos ámbitos, no entrega de la totalidad de la ropa de trabajo estipulada, omisión de pagar el plus de transporte para toda la plantilla etc. Paralelamente una delegación de CNT se entrevistaba con el presidente de Ejidoluz para manifestar el motivo de la protesta y denunciar distintos aspectos que se están incumpliendo del convenio colectivo. De la reunión sacamos el compromiso por parte de la empresa de revisar lo que había sucedido a cambio de que cesarán las movilizaciones hasta el acto de conciliación.
Finalmente la empresa ofreció tratar la resolución del contrato de trabajo como un despido improcedente ofreciendo la indemnización y los salarios de tramitación correspondientes. Desde CNT conocíamos la dificultad que entrañaba ganar un juicio por despido nulo y más con las circunstancias que concretamente rodean este, por lo que consideramos que de la nada hemos obtenido una compensación económica que resarcen los agravios padecidos por nuestra compañera.
No obstante, y ante la degradación paulatina de las condiciones de trabajo en este sector, especialmente en la zona del Poniente Almeriense, donde algunos empresarios están aprovechando el pretexto de la crisis y el miedo al paro para imponer unas condiciones de trabajo abusivas, tanto desde la CNT de Adra, como desde la CNT de Almería, consideramos necesario trabajar en una campaña general de concienciación que esperamos que como mínimo, se traduzca en que los trabajadores tomen conciencia de la explotación y al menos, soliciten a la CNT que tramite denuncias a la Inspección de Trabajo para que esta, requiera a las empresas a cumplir los distintos aspectos del Convenio Provincial del Manipulado de Frutas y Hortalizas que más vulneran las empresas.