SANROB TELECOMUNICACIONES es una empresa dedicada a la instalación de fibra óptica,que presta sus servicios a otras empresas que a su vez dependen de las grandes compañías de telefonía e internet como ORANGE, VODAFONE o MOVISTAR. Es, por tanto, una subcontrata de las que estas empresas se valen para llevar a cabo las instalaciones en los domicilios.
Hacia el mes de junio, SANROB contrató a varios trabajadores como instaladores de fibra óptica, para lo cual les ofreció un periodo de formación teórico y práctico. Durante la formación, los recién incorporados realizaban instalaciones acompañados de trabajadores con más antigüedad. Pocos días después de comenzar el trabajo, Javier, un trabajador afiliado a la CNT-AIT sufrió un accidente laboral al caerse una escalera en la que estaba subido realizando una instalación. En la caída nuestro compañero se rompió la rótula, quedando incapacitado para trabajar y esperando poder solictar la baja laboral. En la posterior visita al médico, le escayolaron la pierna entera y comenzó un largo proceso de recuperación y posterior rehabilitación que a día de hoy continúa.
Cuando Javier comunicó a la empresa que había sufrido un accidente laboral y se había visto obligado a acudir a un médico, comenzó una cadena de despropósitos por parte de la empresa que son ejemplo de irresponsabilidad y chapucería orientada a ahorrarse cuatro duros a costa de la salud de sus trabajadores. Para empezar, ante la incredulidad de nuestro compañero, la empresa le comunicó que no estaba asegurado. Ante tal irresponsabilidad, la propuesta de la empresa fue que volviese al médico para intentar cambiar el parte, mintiendo sobre el día y las causas del accidente, para así proporcionarle un seguro y que constase la fecha del accidente posterior al alta en ese seguro. La intención de la empresa era, por una parte, que no se pudiese relacionar el accidente con el trabajo, y por la otra que no se descubriese que no habían dado de alta a los trabajadores en el periodo de formación, pese a que en este periodo ya estaban realizando su trabajo como cualquier otro empleado. Ante la negativa de Javier a entrar en chanchullos e irregularidades, en las que por otra parte era él el claro perjudicado, la empresa apostó por no reconocer la relación laboral con el trabajador, buscando de alguna manera escurrir el bulto y que no se les cayera el pelo por las graves irregularidades que habían cometido. En ese momento, nuestro compañero pone en conocimiento del sindicato su situación.
Desde la CNT nos pusimos en contacto con la empresa para aclarar lo sucedido, ante lo cual nos comunicaron que estarían dispuestos a hablar de cómo solucionarlo siempre y cuando no pusiéramos denuncia en inspección de trabajo. Una vez más se vio que la empresa sólo estaba interesada en salvar el culo. Por descontado, tanto el compañero accidentado como el sindicato vieron la necesidad de interponer denuncia, y así se hizo. En ese momento, la empresa cortó todo tipo de comunicación con el sindicato y con Javier.
A día de hoy el compañero está terminando el proceso de rehabilitación. Esto implica que ha estado sin trabajar desde el mes de julio. El compañero ha tenido que tirar de ahorros para pagarse la estancia en Sant Boi, ya que la empresa no le ha reconocido el básico derecho de la baja laboral. Por todo ello, la reclamación que hacemos es que se abone el salario del compañero por parte de la empresa durante todos los meses que ha estado de baja, así como una indemnización por daños y perjuicios derivados de la actitud de la empresa ante la engorrosa situación que se ha visto oblidado a padecer Javier. Por otra parte, nuestra intención también es que se corrijan las múltiples irregularidades que se producen en SANROB para perjuicio de sus trabajadores.
Nosotros como sindicato haremos todo lo que esté en nuestra mano para que la empresa ceda ante estas sencillas reivindicaciones. Con esta campaña, de hecho, instamos a SANROB a que ponga solución a este problema lo antes posible, ya que cuanto más tiempo pase más crudo lo van a tener. Ellos verán si quieren dejar el asunto en manos de un tribunal con toda la mierda que acumulan en casa, o si deciden poner fin al conflicto ateniéndose a nuestras peticiones.
Si tocan a uno, nos tocan a todos.
