2.1 Relación con otras organizaciones en el ámbito social
La práctica anarcosindicalista y libertaria ha incluido y vinculado siempre las luchas sociales y culturales con las luchas económicas y sindicales de los trabajadores.
Muchos de los actuales movimientos sociales se pueden rastrear en el movimiento libertario de principios del siglo XX, donde las cuestiones sociales se vinculaban con el movimiento sindical de forma natural a través de una rica red de ateneos , escuelas, colectivos e iniciativas de todo tipo sostenidas por y vinculadas a los sindicatos de CNT.
La influencia de las ideas libertarias está en el germen de los movimientos sociales que han ido surgiendo desde los años 60 y 70 , y han influido en las prácticas y propuestas de buena parte de los movimiento social anticapitalistas en todo el mundo.
Movimientos como el antimilitarismo, el ecologismo radical o el movimiento okupa cuentan con evidentes conexiones con nuestros principios y tácticas. No es difícil rastrear prácticas y modos libertarios en las formas organizativas y en los discursos de otros movimientos sociales.
De igual forma la explotación capitalista se extiende más allá de las relaciones laborales o de la explotación humana a través de la extracción de la plusvalía. La destrucción del medio natural, la xenofobia, la desigualdad, y la sobreexplotación en las relaciones mercantiles hacia los paises que denominan del tercer mundo (incluyendo el propio ser humano como una mercancía), la pérdida de biodiveridad genética, como la cosificación de los animales, entre otras, no pueden ser ignoradas por ninguna organización que aspire a un cambio radical y revolucionario de sociedad.
Observamos a pesar de ello, cierta autoexclusión de la CNT de los movimientos sociales en iniciativas y campañas donde deberíamos tener mayor implicación.
Por ello, defendemos que el anarcosindicalismo tiene que implicarse con fuerza en las cuestiones sociales, y participar y debatir con los movimientos sociales. Debemos ser capaces de generar un análisis que partiendo de nuestros principios, siguiendo nuestras tácticas y buscando nuestras finalidades, sin embargo pueda conectar con la gente joven que rechaza la afiliación a cualquier organización y el trabajo militante, o con otros colectivos sociales.
Vivimos una situación social donde las nuevas formas de trabajo, la precariedad y la temporalidad hacen que el lugar de trabajo no sea para muchos trabajadores, un espacio de socialización o de politización, o que ni siquiera sea percibido como el objetivo de lucha prioritario, incluso para aquellos trabajadores más concienciados con los problemas de la sociedad capitalista.
Hablamos de las luchas vinculadas con la defensa del territorio, de carácter ecológico y/o social, o contra la dominación en general, concretadas en la crítica a la exclusión, la lucha por los derechos sociales, las luchas contra el autoritarismo, el fascismo y la xenofobia, las luchas contra el patriarcado. Sería necesario tener en cuenta las nuevas formas de creación y apropiación cultural , el ensayo de nuevas formas de relacionarse , de producir y consumir, las experiencias de autogestión, ya que conforman un movimiento del que debemos participar, al que podemos aportar y del que podemos aprender.
Debemos ser capaces de integrar la lucha sindical con estas cuestiones sociales desde enfoques complementarios, huyendo de la confrontación entre lucha sindical y lucha social , estableciendo conexiones entre las reivindicaciones más clásicas o sindicales de los trabajadores , vinculadas al salario y las condiciones de trabajo, y aquellas reivindicaciones más globales de cuestionamiento del sistema capitalista desde distintas perspectivas (ecológico, patriarcal, militar, etc).
Creemos que debemos buscar las formas de evitar nuestra autoexclusión de las cuestiones sociales, reafirmando nuestra personalidad como organización y nuestro mensaje de transformación social revolucionaria antiestatista y anticapitalista.
Las grandes organizaciones del siglo pasado con capacidad de incluir la mayor parte del movimiento social e impulsar ellas solas procesos revolucionarios (sindicatos, partidos, etc) han dejado paso a múltiples iniciativas , colectivos y organizaciones que trabajan desde distintas perspectivas, tendiendo a organizarse en redes, en campañas, o reivindicaciones concretas.
Debemos hacerlo aportando nuestra visión de clase a estas cuestiones, incidiendo en la necesidad de cambios revolucionarios globales y no meras reformas, y trabajando sobre la necesidad de conseguirlos desde la autoorganización, el apoyo mutuo y la acción directa y no desde el acceso al poder o atajos políticos.
Esto es una realidad en la que no deberíamos tener problemas para actuar, precisamente desde nuestros principios libertarios, federalistas y de respeto de la autonomía, deberíamos ser capaces de participar e influir desde nuestra perspectiva y con nuestras tácticas. Todo ello sin caer en el plataformismo donde no se respeten nuestras prácticas de horizontalidad, asamblearismo, autogestión, solidaridad, apoyo mutuo, y acción directa.
Evidentemente esto supone trabajar con quienes no compartiendo el 100 % de nuestros planteamientos podamos compartir análisis o reivindicaciones concretas, con quienes podamos acordar unos mínimos en los objetivos y en las formas de trabajar, defendiendo siempre nuestros principios y tácticas, fundamentalmente con el ejemplo. Todo esto sin ser ingenuos y sin perder de vista que los objetivos últimos de determinadas organizaciones corresponden a intereses antagónicos a los objetivos de nuestra organización, y teniendo en cuenta que el fin no justifica los medios.
Creemos que en la relación con otros colectivos e iniciativas se debe respetar la autonomía de los sindicatos en su respectivo ámbito surgiendo de estos las propuestas y campañas, construyendo el trabajo con otros colectivos de abajo hacia arriba desde la base.
Como propuestas específicas por ahora proponemos:
La realización de conferencias de sindicatos en los distintos ámbitos en los que analizar y debatir sobre la acción social de la CNT y la ideonidad, o no, de la participación en distintas campañas, así como nuestro posicionamiento frente a la vinculación de estos análisis con la práctica sindical y las organizaciones que no contradigan nuestros principios, tácticas, y finalidades.
Utilizar nuestra estructura para la agilización en los mecanismos de comunicación y difusión de las distintas campañas y actividades que en este ámbito desarrollan los sindicatos de la CNT.
Impulsar campañas específicas que puedan ser asumidas por la CNT, como podrían ser la objeción fiscal u otras.
Todas estas iniciativas deberán partir de las propuestas de los sindicatos.
2.2 EDUCACIÓN
Actualmente en lo relativo a la educación la realidad que se presenta es un sistema de enseñanza gestionado por el Estado, las instituciones privadas capitalistas y las órdenes religiosas, siendo sus centros educativos donde está escolarizada la práctica totalidad de la infancia .
Es evidente que todos aquellos procesos que se están dando en la actualidad con relación a la educación consistente en privatizaciones y otras formas elitistas (ejemplo es la enseñanza privada-concertada) con un alto componente competitivo y mercantilista, tendrán nuestra frontal oposición.
Aunque desde CNT rechazamos el sistema de enseñanza oficial, no podemos obviar que dentro de ella hay determinadas experiencias con connotaciones libertarias (asamblearismo en el aula, luchas antiautoritarias, movimientos críticos, etc.) gestionadas por algunos trabajadores desde dentro del sistema, y que sin ser la solución, sí que hacen aportaciones hacia una pedagogía libertaria. Hemos de ser consciente sin embargo que la práctica asamblearia en diferentes niveles educativos no tiene porqué significar que se potencie la autonomía del individuo. Existen casos de formas de asamblearismo no horizontal en las cuales se da potestad a los alumnos para elegir en asamblea algunos aspectos de su educación, como por ejemplo la secuenciación de contenidos, sin permitirles decidir cuáles serán éstos. Hay corrientes críticas que presenta al profesor como una especie de vanguardia. No debemos apoyar todas las pedagogías críticas, sino las pedagogías con un fuerte contenido libertario. La pedagogía crítica engloba teorías del marxismo y esto tiene repercusión en la forma de considerar la educación dentro de un contexto social y de reproducirlo, como hemos dicho, en el aula.
La CNT como asociación, tiene como objetivo la transformación de las estructuras sociales vigentes y el establecimiento del comunismo libertario. Considera contradictorio que nuestros niños y niñas tengan que acudir a la escuela oficial siendo educados en valores ambiguos, egoístas, rígidos, competitivos e indolentes. De esta manera no tienen la oportunidad integral (el contexto familiar y social también es educativo) de ser educados libremente y en consonancia con valores libertarios. De no ser así se ve truncada en gran medida su proyección ética en el futuro.
Por tanto , en el terreno educativo, promoveremos cuando existan las condiciones y posibilidades adecuadas la creación, apoyo y mantenimiento a proyectos pedagógicos afines destinadas a los hijos de les trabajadores. En su defecto cada sindicato puede ponerse en contacto con los proyectos pedagógicos libertarios que pudieran desarrollarse en sus proximidades con la intención de apoyarlos en la medida de sus posibilidades.
Además de los ejemplos de escuelas libertarias más conocidos y que fueron un referente histórico hasta el final de la Revolución Social y que han sido posteriormente reproducidos en los últimos tiempos hay que tener en cuenta que existen también otras propuestas pedagógicas libertarias e incluso algunas que difieren del concepto de escuela incluso en el sentido físico; sustituyéndolo por la adaptación de los espacios comunes dotándoles de herramientas de aprendizaje adecuadas a cada edad y desde una perspectiva de aprendizaje vivencial integral.
Son también de especial interés los proyectos autogestionados en relación a la educación de adultos así como fomentar la creación de Ateneos Libertarios donde autoformarnos y donde profundizar en las diferentes temáticas. Esto permite proyectar nuestras ideas hacia el exterior por un lado y por otro potenciar, de cara a los sindicatos, que tomemos nuestros acuerdos de una forma más eficaz.
2.3 ECONOMIAS COLECTIVISTA Y PROYECTOS AUTOGESTIONADOS
Creación de iniciativas autogestionadas de producición-consumo que pertenezcan a los sindicatos
2.3.a. En cuanto a la producción:
Partiendo del análisis los proyectos de tipo auto-empleo o cooperativas de producción hay un símil que puede ilustrar bien su comprensión: un trabajador asalariado ha de servir a las condiciones que le impone el patrón; al trabajar en régimen de autónomo no te liberas ya que las condiciones te las impone el mercado y al Estado (seguridad social, leyes relativas al sector, hacienda, jubilación, cuotas de producción forzosa, subvenciones en determinadas condiciones,…). Lo mismo sucede en una cooperativa de producción: de puertas adentro puede ser muy horizontal pero de puertas afuera ha de someterse a las condiciones del mercado, y por tanto al capital. En consecuencia puede generarse una subclase empresarial o una auto-explotación voluntaria.
Para poder dotar a este tipo de proyectos de producción de un potencial emancipador de acuerdo a nuestros principios, tácticas y finalidades es necesario cerrar el ciclo producción-consumo sin que el instrumento de intercambio sea el mercado (lo que en el concepto confederal de comunismo libertario Isaac Puente llama medio o signo de cambio). Esto implica que los proyectos productivos partan de los propios sindicato y no de fuera de estos y que además tengan carácter colectivista, que no de cooperativa.
El concepto del cooperativismo es una transformación o denigración del concepto del colectivismo, como idea originaria de socialismo humanista vertido y concretado en los principios de constitución de la 1a Internacional, de cuyos principios la C.N.T y el anarquismo en general son herederos.
La terminología cooperativa de producción y consumo empleada en la mayoría de los acuerdos de los sindicatos que las apoyaron, hacen a continuación matizaciones de funcionamiento y fines, que nos dan pie para identificarlas con el contenido colectivista propio del movimiento anarcosindicalista. Por lo que se adoptó como definición para todos los casos el término COLECTIVIDAD DE PRODUCCIÓN Y CONSUMO.
Por lo tanto rechazamos el cooperativismo como finalidad, cuya dinámica lleva a la integración en la sociedad capitalista creando nuevos empresarios o una autoexplotación voluntaria en beneficio del mercado y del Estado.
Las colectividades de producción y consumo que actualmente se puedan crear no tienen que ser consideradas como medio directo y absoluto para alcanzar la emancipación de los trabajadores.
Estas pueden servir como medio indirecto para aliviar nuestros problemas adquisitivos y por otro lado llevar a la práctica unas realizaciones en las que se demuestre la capacidad de autoorganización de los trabajadores, eliminando a los intermediarios, almacenistas, especuladores, etc.
Estas colectividades de producción-consumo no son ni proyectos de autoempleo ni cooperativas sino que el trabajo sale adelante por la participación voluntaria de los componentes de la colectividad.
Las colectividades de producción y consumo, según lo actualizado de congresos anteriores, se dividen en dos apartados:
a) Casos de industrias a colectivizar por cierre patronal, abusos, etc. en las que se tendría muy en cuenta las condiciones en que son dejadas y la dependencia de otras industrias en lo relativo al suministro y/o distribución de productos.
b) El otro caso, según las ponencias, lo ocupan las Colectividades de Producción Agrícola consideradas como parte importante del apartado de alternativas al problema agrario.
Las bases de organización de Colectividades están dadas en función del sentir mayoritario de los sindicatos, que coinciden en principio en su implantación agrícola, como posibilidad más viable actualmente. Este sistema de organización, fines, etc., es adaptable a cualquier tipo de Colectividad de Producción y Consumo que en un futuro pueda crearse dentro de la sociedad.
A falta de un estudio exhaustivo sobre la historia y características técnicas del movimiento cooperativo, se precisar una orientación de tipo general para el funcionamiento de estas Colectividades de Producción y Consumo.
Ante la estructura económica capitalista, los anarcosindicalistas promovemos las Colectividades de Producción y Consumo, aunque no como medio absoluto para alcanzar la emancipación de los trabajadores. Considerando que su funcionamiento será en base a no ser confundido en ningún momento con el sistema de cooperativas oficiales que tienden a reproducir el concepto de pequeño empresario.
La estructuración general atenderá a lo siguiente:
- Partirá de pequeños núcleos (sindicatos, Federaciones Locales, etc.) para extenderse a los ámbitos naturales (comarca, provincia, región, etc).
- Su estructura será aquella que no pueda ser controlada ni asimilada por el sistema.
- Su coordinación será federalista, manteniendo la autonomía de los núcleos.
- Su régimen de funcionamiento será autogestionario.
- Su finalidad no será lucrativa, o sea que los beneficios serán invertidos en la colectividad y en el sindicato.
- Los titulares de las Colectividades de Producción y Consumo, serán los sindicatos, Federación Local, etc. y no la organización como entidad.
- Se utilizará la vertebración orgánica, para el desarrollo, apoyo e implantación de las Colectividades de Producción y Consumo.
La CNT no puede, con la fuerza actual de la organización, abarcar todo, y debe tener claro a qué apostar y cómo apostar. Pensamos viable empezar en el ámbito agrario, sin detrimento de otros sectores, por lo anteriormente expuesto y por requerir una menor correlación de fuerzas para acceder a la toma de los medios de producción.
Los proyectos que creen los sindicatos deben servir para integrar en la lucha anarcosindical viviendo experiencias que potencien más la idea de la necesidad de revolución, propaganda por el hecho que sirva para apoyar la lucha anarcosindical (cobertura de necesidades en casos de crisis económica, ayuda a represaliados, apoyo a huelgas…).
2.3.b. En cuanto al consumo
Frente a la comercialización capitalista debemos luchar por la eliminación inmediata de los intermediarios. Potenciar canales de comercialización alternativos a los capitalistas. Intentar utilizar al máximo la estructura sindical para esa distribución. Esto debe lógicamente venir acompañado de una red de colectivos o cooperativas de consumo colectivizadas que se abastezca de estos productos y les dé salida, dando así un ejemplo de organización como consumidores. (V Congreso, punto 8.7.3b) Posibles líneas alternativas )
El modelo de cooperativa de consumo se viene conociendo con el nombre de GAKs (Grupos autónomos de consumo). En los proyectos cooperativos que únicamente se basan en el consumo se potencia al pequeño (o no tan pequeño) empresario más ecológico, más equitativo, más justo, pero empresario al fin y al cabo. El concepto de GAK puede ser entendido también en parte como una adaptación o contextualización del label sindical. Pensamos que crear GAKS en los sindicatos sería un paso adelante en la práctica, pero solo en el sentido en el que producción y consumo son las dos caras de la misma moneda y por tanto es necesario incidir en ambas.
Sin embargo tenemos bastantes reticencias pues vista la evolución real que han tenido los grupos de consumo en las zonas donde más se han desarrollado (Madrid, Cataluña, Andalucía, etc) vemos un paso atrás en la claridad y comprensión de la cuestión cooperativa vs colectivismo con respecto al V congreso.
Entendemos que los GAKs nunca han de ser un objetivo de la CNT, sino una táctica dentro de la situación actual, al no poder abastecer y coordinar la producción y el consumo a través de las federaciones de ramo. Para responder a nuestros principios, tácticas y finalidades ha de dirigirse dicha herramienta nuevamente hacia el colectivismo, superación del intercambio a través del mercado buscando reducir al mínimo el dinero en favor de acuerdos basados en una satisfacción de las necesidades planificada y participativa.
Por ello se podrian adaptar los GAKs a los principios, tácticas y finalidades de la CNT. Por supuesto no solo el nombre, que podría ser el de Grupos Confederales de Consumo, sino definir su objeto y funcionamiento. De la misma manera que los proyectos de producción han de cerrar el ciclo hacia el consumo los proyectos de consumo han de caminar hacia la colectivización de los medios de producción.
A través del GAK se pueden establecer pactos con los productores presentándose diferentes opciones de relación según el caso, llegando a acuerdos en los que progresivamente se asuma la producción y consumo de forma compartida. Pero a través del consumo también se pueden establecer conflictos de lucha exigiendo determinadas condiciones, como demuestran casos históricos dentro del anarco-sindicalismo como las huelgas de consumo del pan, boicots ante el abuso de los tenderos o huelgas de alquileres.
2.3.c. Cuestiones a considerar para los proyectos económicos dentro de la CNT. Hacia la construcción de una alternativa económica al mercado y al estado
Creemos que las cuestiones de este calado ha de ser resultado del debate y las aportaciones del conjunto de la organización en referencia a los proyectos económicos dentro de la CNT, siendo conscientes de que no alcanzaremos el comunismo libertario sino a través de la revolución social.
A modo de ejemplo cuando hablamos de economía hablamos de la satisfacción de necesidades partiendo de los recursos que disponemos, por tanto el objetivo de la activdad económica no tiene por qué ser de caracter monetario. Es decir, puede realizrse un proyecto productivo en relación a la edición de libros u otros materiales dirigido a su venta, pero también puede realizarse con el proposito de dotar a los sindicatos de los materiales que consideráramos necesarios.
2.3.c.1. Una economía colectiva. Frente al individualismo, una de las características esenciales del Capitalismo. Todas las demás bases han de construirse desde esta lógica de lo colectivo. Esta opción no ha de menoscabar el respeto por la persona y el libre desarrollo de su personalidad y creatividad en convivencia con la de las demás.
2.3.c.2. Consenso en cuanto a los principios básicos: Sentar unas bases claras que queden reflejadas por escrito, que no haya que discutirlas constantemente y que no den lugar a infinitas interpretaciones. Esto implica el profundizar sobre las cuestiones básicas del proyecto hasta llegar al consenso. Es necesario un conocimiento mutuo previo entre las personas que quieren formar parte del proyecto.
2.3.c.3. Cubrir necesidades básicas como objetivo: Partir de un estudio de las necesidades básicas (materiales y no materiales) a cubrir ya que la planificación ha de ir en base a estas. Planificar implica no solo el qué y el cuándo, sino el quiénes y el cómo y por tanto una formación previa sobre los conocimientos y habilidades prácticas necesarias. Cubrir las necesidades básicas implica la renuncia de necesidades superfluas (sean las propias de los integrantes o de otros en caso de que se produzca para fuera).
Es fundamental para que las planificaciones se adapten a la realidad y se vaya aprovechando la experiencia acumulada hacer evaluaciones periódicas. No sólo han de evaluarse las actividades planificadas respecto de sus objetivos a corto plazo sino también ver en qué grado lo realizado se aproxima a los principios, tácticas y finalidades de la CNT y su repercusión en la actividad del sindicato. Por último es necesario re-planificar siempre en función de los resultados de las evaluaciones.
2.3.c.4. Autogestión: La independencia respecto de toda forma de poder es consecuencia de una actitud que debe estar presente en todo proyecto alternativo al sistema dominante: estar constantemente en contra del poder. La toma de decisiones ha de hacerse en asambleas por quienes forman parte del proyecto. Pero el asamblearismo no está exento por sí mismo de formas de poder. Para poder decidir en igualdad es necesario disponer de formas de comunicación en las que todo el mundo tenga acceso a la información. No hay horizontalidad cuando las decisiones son en igualdad pero la participación no, ya que unas personas deciden lo que tienen que hacer otras. Autogestionar no es sólo decidir, también es hacer. Aunque cada cual ha de participar en la toma de una decisión en la medida en que ésta le afectará en cuestiones fundamentales, la última palabra la tendrá el sindicato .
2.3.c.5. Aprendizaje permanente: El grado de experiencia y conocimientos afecta a todas las demás bases planteadas: desde cómo se toman las decisiones hasta nuestra relación con el medio. Es fundamental crear espacios para el aprendizaje colectivo, o mejor aún que se facilite durante el desarrollo mismo de las actividades la posibilidad de aprender (para ello ha de ser tenido en cuenta en la planificación de esas actividades) y llevado a todos los campos de manera trasversal.
2.3.c.6. Actividad no especulativa: Cualquier actividad de intermediación con carácter lucrativo es contraria a la acción directa y no tiene carácter económico sino especulativo por tanto CNT nunca ha de participar de ello. (El transporte sí es actividad económica) .
2.3.c.7. Estabilidad independiente del crecimiento: a diferencia de lo que ocurre en el Capitalismo, no debe requerir un crecimiento constante para sobrevivir. Para ello hay que eliminar la obsesión por el crecimiento cuantitativo y pensar más en la multiplicación de las iniciativas y su federación así como en el crecimiento cualitativo en cuanto a llevar a la práctica los principios básicos.
2.3.c.8. Acceso a los medios de producción: los medios de producción no son sólo materiales, sino también los conocimientos, las relaciones, etc. Una economía alternativa no puede basarse en tomar los medios de producción tradicionales del desarrollismo capitalista para simplemente ponerlos en otras manos (por ejemplo, no tendría sentido autogestionar las necesidades energéticas ocupando una central nuclear). Hay medios de producción que es preciso re-apropiarse, pues están en poder de las clases dominantes, y otros que hay que re-tomar porque han sido desvalorizados y condenados al olvido. Así hay que cambiar la correlación de fuerzas para tomar el control de los recursos naturales, pero otros medios de producción como son el conocimiento de la naturaleza o la capacidad de auto-organización precisan de grupos de aprendizaje colectivo para recuperar conocimientos campesinos seculares adaptados a las realidades locales y la memoria histórica de las luchas de nuestra organización
2.3.c.9-Preferencia por el uso de tecnologías simples. La tecnología empleada no debe generar nuevas necesidades ni dependencias. En el grado de eficiencia (resultados obtenidos entre recursos utilizados) hemos de incluir en los resultados los efectos no deseados y el tipo de organización social que reproduce y en recursos utilizados no atender solamente al momento de su utilización sino de la encadenación/acumulación de costes reales anteriores. Es fundamental la recuperación de conocimientos válidos en cuanto a autonomía y eficiencia de otras épocas y culturas e idear (que no idealizar) diferentes formas de producir. El empleo de otras tecnologías ha de ser tras un estudio razonado de sus repercusiones y no se excluye el uso de las mismas.
2.3.c.10. Relación equilibrada con la naturaleza: empieza por tener en cuenta el coste ecológico real de lo producido. Por un lado, el consumo de materias primas y energía de todo el proceso debe respetar la capacidad de regeneración de los recursos naturales que emplea. Y por otro lado, ser conscientes de los efectos no deseados y el deterioro que nuestra actividad económica genera a la autorregulación del sistema natural. El sistema natural ha de ser recuperado, entre otros motivos, porque en última instancia de él proviene todo lo necesario para la vida y su reproducción.
2.3.c.11. Interacción con el contexto social. Un proyecto no puede estar encerrado sino transcender al resto de la sociedad. Asimismo, dado que el Capitalismo no es sólo un sistema económico sino que la dominación se extiende en todos los aspectos de la vida social es necesario insertar esta lucha económica en los procesos más amplios de lucha que mantenga la CNT.
2.3.c.12. La tendencia natural en base a nuestros objetivos es la de ir prescindiendo de la relación con el mercado capitalista.
2.3.c.13. Tomar parte en redes económicas de apoyo mutuo. Es muy difícil que un proyecto aislado pueda cubrir todas sus necesidades. Por ello es imprescindible en el futuro la coordinación de los mismos a través del ámbito y cauces orgánicos así como crear alianzas con otros proyectos, federaciones, personas y grupos afines extendiendo el apoyo mutuo.
2.3.c.14. Influencia de lo no económico en lo económico. Lo económico no es todo. Hay cuestiones que afectan a la Economía que no pueden resolverse desde lo económico. Sin un cambio a nivel cultural, de valores, de conciencia y de formas de relacionarnos no será factible ninguna alternativa de calado. De cara a un bienestar personal y colectivo tiene que haber equilibrio también entre lo que se piensa, lo que se siente y lo que se hace.
2.3.c.15. La excepción no hace la regla. Hay veces que en la práctica no queda más remedio que no cumplir alguna o varias de las bases anteriores. Estas decisiones no tienen por qué afectar al futuro del proyecto si se toman de manera bien consciente y con conocimiento del sindicato. Por tanto no han de sentar precedente ni pasar a convertirse en algo habitual. Además es imprescindible que se acompañen de un compromiso de buscar otras soluciones coherentes con los principios de la organización para las próximas veces en que se presenten de nuevo dichas situaciones. Esto es especialmente importante cuando se plantea empezar de una manera para poco a poco pasar a hacer las cosas como realmente queremos.
2.3.c.16. Que funcione: es decir, que vaya cumpliendo con los objetivos que se marque la organización. Cuando no funcione no hay que desanimarse, sino estudiar si el fallo está en que falla la propia formulación del proyecto (bases, planificación) o bien si lo que falla es su desarrollo.