Sobre las 12:00 de la mañana en un caluroso día de mayo, la anarcosindical toledana daba salida a su manifestación de trabajador@s desde la Plaza de Toros.
En Toledo, la CNT participa en el mismo recorrido que los «mayoritarios”, tratando de desmarcarnos en el espacio y al final hace una intervención en el mismo escenario, también separada en el tiempo minutos después.
Alrededor del centenar de personas secundaron la manifestación, cada año más numerosa, que la CNT de Toledo había convocado, encabezada por una pancarta con la leyenda: “Cuando los banqueros se enriquecían, ¿lo repartían? Autogestión Obrera”.
Se repartiendo trípticos entre los mirones y turistas que este día abundan en el Parque Temático Histórico que quieren convertir el casco antiguo de la ciudad.
La manifestación llegaba a su final en la plaza de Zocodover, dónde tuvo lugar el mitin a cargo de alguien «de la cantera»: el compañero Presti, ya veterano, afiliado a la Organización en 1977, entonces en Puertollano.
Tras los discursos de CCOO y UGT, con marcado trasfondo político, algunos «compañeros» de estos sindicatos procedieron a la retirada de sus pancartas del escenario, con una minuciosidad deliberadamente lenta que rayaba en la provocación, con el fin de que el grueso de los asistentes se disolvieran.
Asimismo este año no dieron el refrigerio y la paella de años atrás, quizá debido a que el discurso final nuestro del año pasado hizo que a mas de uno se le atrangatara el arroz.
La intervención del compañero Presti estuvo, cuanto menos, a la altura de años anteriores.
Hizo valoraciones sobre los cien años de lucha anarcosindicalista, sobre las zancadillas que el poder nos ha puesto, (con especial hincapié en el Caso Scala); de su diatriba sobre como los «mayoritarios» han vendido a la clase obrera desde los Pactos de la Moncloa:
“Si tras treinta y tantos años de pactos y reformas que se han presentado como logros para consolidar el empleo de calidad, hemos llegado a la lamentable situación en la que hoy nos encontramos, la clase obrera se tendrá que plantear si, en lugar de tanta reforma, no será mejor derribar la casa y construir una casa nueva”, haciendo unas emotivas frases con la «casa nueva» como metáfora de la Revolución Social que los asistentes rubricaron con un cerrado aplauso.
Tras acabar el mitin, sonó por la megafonía el bello canto del Pueblo: A las barricadas, que alentó el espíritu de los asistentes, dando por terminada la jornada reivindicativa del 1º de mayo.
