El pasado domingo día 10 de junio en el cementerio de Ocaña (Toledo),
tuvo lugar un emotivo homenaje a los millares de asesinados por el
franquismo entre el 1939 y 1954. Una vez más, la Asociación de Familiares de Ejecutados en el Cementerio
de Ocaña AFECO), se congregó en un acto, con el fin de seguir
esclareciendo los crímenes del fascismo. El intento de arrojar luz e
identificar a los familiares asesinados y sepultados en varias de las
fosas comunes repartidas por el cementerio se convierte en una
prioridad para esta asociación.
Este homenaje y ofrenda floral, respondía a la inauguración de unas
placas con los nombres de aquellos asesinados que la asociación ha
podido investigar entre las partidas de defunción y otros registros
oficiales, en los que se han podido plasmar aproximadamente, la
escalofriante suma de 1500 nombres de personas exterminadas en esta
localidad. Según cuentan miembros de la asociación, aun no se puede
contabilizar la totalidad de los ejecutados por lo que han dejado
espacio en las losas para seguir sacando del anonimato las víctimas
de aquel genocidio y poder cincelar los nombres que sigan
apareciendo.
Aunque han contado con ayuda económica por parte de alguna administración,
en relativas cuentas, son muy escasos lo recursos destinados a la
búsqueda de la verdad y la reparación de nuestro más oscuro
episodio nacional. Dan cuenta de que para poder hacer frente a estas
costosas indagaciones y poder construir mausoleos de cierta dignidad,
han de sufragar ellos mismos el grueso de los gastos. Todo ello en un
continuo silencio y de continuas trabas, que les impiden llevar a
cabo este ejercicio.
Para hacernos una idea de la importancia de este hecho, hay que tener en
cuenta que para aquella época y siendo Ocaña una población tan
pequeña, de apenas unos 6500 habitantes, el régimen franquista con
fuertes medidas represivas y con su prisión, el Penal de Ocaña,
fue clave en plena dictadura para hacer desaparecer, torturar y
ejecutar a miles de personas disidentes de toda España. Hoy día y a
pesar de ser miles los hallados en las fosas, todavía no se toca
fondo.
Unos pocos miembros de CNT- Aranjuez,nos personamos para dar apoyo a los
familiares de las víctimas del terrorismo de Estado y su ardua tarea
por arrojar luz. Nos sorprendió que ningún representante político
del municipio haya hecho acto de presencia, puesto que fueron ellos
mismos quienes nos avisaron por teléfono para acudir al acto. Esto
deja de manifiesto que las heridas siguen abiertas y se respira
cierto miedo en el ambiente. Hay que señalar que el gobierno del PP
y la iglesia han estado más preocupados por hacer coincidir la
celebración del Corpus Christi, a sabiendas del evento en el
cementerio. Esta festividad religiosa debió celebrarse el pasado
jueves que era festivo como siempre se ha venido haciendo en la
localidad.
Una vez más apreciamos que la derecha ultracatólica no solo muestra las
formas de boicot ante este tipo de actos, sino que además
manifiestan su complicidad en los hechos con su actitud opositora o
confusa.
Fotos y texto: C.M Homer
