El
pasado día 13 las asambleas estudiantiles de Filosofía, Psicología,
Derecho, y Filología salieron a la calle con el apoyo de la CNT y el
sindicato estudiantil AMEC.
Partiendo desde el Campus Central de la ULL con dirección al Rectorado, hasta 200 manifestantes han paralizado calles y avenidas. Cargados de
consignas combativas y la idea de un mundo nuevo que, dicen, no cabe en
las urnas ni, desde luego, en una Universidad que tiende a la
privatización y a la que, cada vez más, solo pueden acudir las elites
económicas del archipiélago.
Así, ante la nefasta implantación del Plan de Convergencia Europeo (ya
de por sí pernicioso), la constante criminalización de los grupos
estudiantiles y la próxima apertura de la Universidad Privada de la
Orotova, el estudiantado canario sale y continuará saliendo, hasta
conseguir sus objetivos. De esta forma nos dirigimos hacia la
construcción de instituciones que dignifiquen y no generen docilidad,
que entiendan y no que censuren, que en definitiva traten a sus miembros
como lo que son, personas capaces de asumir las riendas de su formación
y paso por la Universidad.
Desde la CNT-Canarias entendemos que esta situación se hace extensible
al personal laboral de la ULL (docente o no) cuyos puestos penden de un
hilo debido a los drasticos recortes que año tras año se realizan en los
organismo dedicados a la formación básica y superior.
Por ello de nada nos ha valido la aparición del actual rector E.
Domenech al final del acto. De nada decimos, ni como estudiantes ni como
obreros nos ha servido el que, un día antes de las elecciones invite al
dialogo cuando después de años de gestión ha ignorado las decisiones
tomadas en el claustro, cuando ha coartado cualquier acto de disidencia o
crítica eliminando las posibilidades de llegar a un consenso entre
rectorado y estudiantes.
Además, vemos que la llegada de la LOU y la implantación del Plan
Bolonia ha creado como esperabamos un clima de confrontación en el que
se divide al profesorado, los estudiantes y el personal no docente en
grupos enfrentados. La reconciliación es imposible hasta que
comprendamos que este espacio (el universitario) es de todos, que
recuperarlo de las garras y políticas del poder neoliberal es
fundamental si queremos avanzar como sociedad y lograr organizar una
alternativa valida. El cariz “consultivo” que ha adquirido el Claustro
(organo de representación de todos los miembros de la Universidad), la
aparición de masters que postergan y encarecen la formación que antes se
adquiria dentro de la propia carrera, o la introducción de las empresas
privadas dentro de las facultades son la punta del iceberg de la
verticalización de los centros de formación superior. De esto son
responsables lo gobiernos rancios anti-obreros del PP, PSOE y Coalición
Canaria, puesto que todos han colaborado en la creación de este contexto
totalizante, pero tambien el “señor” Eduardo Domenech quien desoyendo
la voz del estudiantado y de los sectores críticos del personal docente
ha promovido y elogiado estas iniciativas.
Ante este panorama, a partir de ahora y como siempre nuestra postura es
clara, responder a la violencia y al autoritarismo institucional en
nuestras aulas, trabajos y calles. Creando espacios de dialogo reales,
horizontales y asamblearios porque a pesar de querer vernos dóciles, el
que tras las eleccionesse convierta en rector va a encontrar
a una juventud reivindicativa que se autoorganiza y se preparar para
construir una sociedad y una educación nueva, y para todos y todas.
La lucha que nos toca. La lucha que nos hace solidarios.