La
CNT de Tarragona abre un nuevo conflicto sindical con Comaden
Gall, empresa propietaria de la Residencia de la tercera edad
Mirador Barà, situada en Roda de Barà (Tarragona), tras el
despido del delegado de la Sección Sindical de CNT en dicha
empresa. Cabe decir que se trata
del segundo despido en pocos meses de un trabajador
afiliado a dicho sindicato.
En
aquella ocasión, despidieron al fisioterapeuta de la residencia,
mediante un simulacro de despido disciplinario, completamente
injustificado y que solamente respondía a la pretensión de la
empresa de deshacerse, sin tan siquiera indemnización, de un
trabajador que había realizado diversas reclamaciones laborales,
de higiene y de atención y servicios con los residentes,
deficiencias todas ellas de sobras conocidas por la empresa, pues han
sido detectadas y sancionadas por la Generalitat en
numerosas ocasiones.
Tras
aquel acto de represalia sindical, se abrió conflicto laboral con
una campaña pública, paralela a la demanda judicial por despido,
que fructificó con el resultado que la empresa reconocía a las
pocos días, y sin necesidad de llegar a juicio, aquel despido como
improcedente y se cerraba un acuerdo favorable para el
trabajador.
Pero
de nuevo, Comaden Gall pretende
impedir toda actividad sindical entre los trabajadores de su empresa,
y despide ahora
al delegado de la Sección Sindical de CNT.
Sección Sindical que la empresa ha sido siempre reacia a reconocer,
y no ha dudado nunca en tratar de silenciar.
La
represión
comenzó desde el mismo momento que se
constituyó la sección sindical y se reclamó una solución a
diversas irregularidades, tanto higiénicas como de falta de atención
a los ancianos allí residentes, y también incumplimientos de varios
puntos del convenio colectivo y de los derechos de los trabajadores
que la empresa viola continuamente.
Hay
que destacar que
el trabajador
despedido
está a la espera del juicio por la demanda penal que presentó tras
las graves
amenazas de muerte que sufrió por parte de
uno de los propietarios, que no aceptó que los empleados de la
residencia se organizasen en un sindicato.
Esta
es la política laboral de Comaden Gall ante
la libertad sindical: censura, represión, amenazas y
finalmente el despido.
En
este caso, el conflicto sindical se extiende también a la empresa
STS
Grup,
pues dicha mercantil ha asumido recientemente, mediante una
subrogación, la gestión de la Residencia Mirador
Barà,
y
debería mantener al delegado sindical en su puesto de trabajo y en
las mismas condiciones laborales, al igual que con el resto de la
plantilla.
Dentro
de la campaña abierta, paralela a las oportunas acciones judiciales,
ya se han realizado dos actos informativos: el
pasado día 26 de octubre en las puertas de la residencia y por la
población de Roda de Barà, y el 28 de octubre en Reus, frente a la
sede de STS Grup.
Desde
el sindicato CNT se mantiene el compromiso de continuar las acciones
informativas y con la campaña de denuncia de la represión sindical
en la
Residencia Mirador
Barà
hasta
que
se readmita al delegado sindical despedido y se respete la libertad
sindical en dicha empresa.
CNT Tarragona
